—Creo que eso no es de tu incumbencia. — Resmungó, intentando apartarse pero seguía bloqueada.

—Ustedes son el tema del momento, bebé. — Mencionó Harry, Camila una vez más rodó los ojos, irritada.

—Harry... ¿Por qué no te vas a joder a otro lado? — Empujó al chico con una mirada dura, Harry hizo otra falsa cara de estar ofendido.

—Ah, ¿Cuál es el problema? ¡Pensé que éramos amigos!

—Eres un idiota y un esnob, ¿Por qué yo sería amiga de alguien así? — Dijo con veneno en la voz.

—No sabes lo que estás perdiendo. — Él le guiñó un ojo, y luego se alejó.

Camila rodó los ojos una vez más, y siguió de camino fuera de aquella casa, más específicamente hasta el patio, que parecía el lugar más tranquilo de la fiesta. La música alta sólo empeoraba su dolor de cabeza, la última vez que había bebido tanto así fue hace casi una semana atrás, y la latina había quedado tan mal que juró nunca más hacer eso otra vez.

 ¿Por qué las personas creen que el alcohol podría curar el dolor de un corazón herido?

Camila negó con la cabeza, caminó hasta la piscina y se detuvo para analizar el lugar. Era bien cuidado, con una buena iluminación y poseía unas tres o cuatro mesas repartidas con sillas a su alrededor. La noche estaba linda y sólo había dos personas hablando al fondo. Eran dos chicas y estaban sentadas muy cerca, Camila sabía quién era la segunda persona, la latina también ya la conocía de muchas clases de cálculo. Una tenía la mano en el muslo de la otra, mientras la otra susurraba algo en su oído para luego levantarse con una sonrisa enorme en los labios y salir con dos vasos en la mano.

Entonces la mujer que se había quedado levantó la mirada. Lauren Jauregui.

¿Camila conocía de Lauren Jauregui? Claro. La chica de los ojos claros y cara bien moldeada, era una de las mejores amigas de Zayn Malik. Su novio, que en el momento era su ex novio. Por sus rasgos, se podía ver que era alguien joven, tal vez 19, como máximo 20 años. Camila siempre había estado intrigada por ella.

—¿En serio? — La voz de la latina sonó y Lauren giró la cara rápidamente hacia la voz y pareció sorprendida al ver a la latina. — ¿Keana Marie? ¿No había nadie mejor?

—¿Cabello? — La latina sonrió.

—Hola, Lauren.

—No sabía que habías venido a la fiesta. — Lauren dijo, luego frunció el ceño curiosa. Camila se encogió de hombros.

—No tenía nada mejor para hacer.

Hubo un silencio incómodo. Lauren encaraba la latina discretamente, sus ojos recorrían todo su rostro y bajaron hasta el escote de su vestido pegado al cuerpo. Camila era una latina de rasgos perfectos y bellas curvas, tan atractiva que todo lo que Lauren podía pensar era en cómo aquella mujer iría a su cama.

Negó con la cabeza, pero ¿En qué mierda estaba pensando?

—¿Has visto a Zayn? — La voz de la latina se hizo presente de nuevo, rompiendo el silencio.

—No. — Lauren respondió simplemente. La latina vio cuando la morena sacó algo en el bolsillo y comenzó a enrollar un porro delante de ella.

Strangers (Camren) - TraducciónWhere stories live. Discover now