Porque de todas las posibilidades, él en ningún momento...
— Iruka... — susurró, aún atónito, deteniéndolo a segundos del primer roce, interponiendo su dedo índice sobre la base de sus labios —. ¿Qué haces? Aquí aún hay mucha gente, incluso Kei está viéndonos, no querrás que... — miró por encima de su hombro, chocando con la enorme cantidad de invitados, entre ellos, los novios. Y no era una exageración, al contrario, gran parte de las personas seguían bajo el techo, dudando por un momento en si seguir al resto, quienes caminaban totalmente ajenos a lo que ocurría a su alrededor, refugiándose tras la calidez del interior.
Y era lo más lógico.
Sin embargo, no fue hasta que las manos de Iruka se posaron sobre sus mejillas, que volvió la mirada, respondiendo inmediatamente a su toque, en un acto casi automático.
— ¿Por qué te importa tanto? — preguntó, aún cuando imaginaba su respuesta.
— Bueno, tú dijiste...
Este volvió a negar −esta vez con un lento movimiento−; confirmando así sus sospechas.
— Ya no tienes de qué preocuparte, Kakashi, olvida lo que dije — sonrió, quedándose hasta con la última gota de valentía, esa extraña sensación que había brotado a raíz del miedo; brindándole una confianza que hasta el momento nunca había sentido —. Aunque... ahora que lo pienso, esta es la segunda vez que me rechazas.
Rió, confundiendo un poco a su compañero.
— ¿Debería simplemente rendirme? — su voz sonó pequeña, quizás hasta algo ronca. Aún cuando el tono fue agudo, como si arrastrara las palabras, estremeciendo el corazón del peliplata.
Kakashi le miró asombrado, cayendo recién en cuenta de su cercanía. Y es que había estado tan preocupado por proteger a Iruka de la gente, que su cerebro no pareció entender lo que ocurría, no hasta que él le concedió su permiso.
Tragó saliva.
— Yo no... — susurró, notando cierta agitación en su pecho, aún sin saber qué hacer, ignorando completamente las gotas que resbalaban por su cabello, casi tan sorprendido como hasta hace un momento —. Pero... Ah, nunca quise, ¿yo?
Iruka sólo rió, algo enternecido por su reacción, era la primera vez que le veía dudar tanto.
— No te preocupes, lo superaré — hizo alusión a su negativa, acariciando su mejilla débilmente —. Por ahora es mejor que volvamos con los demás, la lluvia podría ponerse peor, y no creo que nos convenga pillar un resfriado.
Dio un paso hacia atrás —aún sin darse la vuelta— después de todo, la idea era que la gente no viera su rostro, y aún a esa distancia, podía notar las miradas clavadas en la espalda.
— ¿Nos vamos? — atrapó el pliegue de la máscara, preparándose para dar media vuelta.
Entonces, cuando Kakashi pareció salir de su desconcierto; su cuerpo se movió, deteniendo rápidamente a Iruka, evitando que este siguiera adelante con sus planes. No podía simplemente dejar que se fuera, no cuando había entendido todo tan mal.
— Por favor, espera un momento — bajó sus manos, aún con movimientos lentos, dando gracias al cielo porque la lluvia estuviera cesando, casi como un regalo —. Yo... en ningún momento quise rechazarte.
Este le miró sorprendido.
— Aquella vez, simplemente no quería aprovecharme de ti, digo, ¿cómo podría? — se deshizo del agarre, llevándose las manos torpemente hacia atrás, esperando no haberlo lastimado —. Ese día estabas tan triste, además de que tu amor... bueno, querías esperarlo, ¿no?
Iruka asintió.
— Por eso te detuve.
— ¿Incluso ahora?
El joven sonrió.
— ¿Y entonces..? Si en este momento, te dijera que realmente quiero besarte, ¿aún así me detendrías?
Este le miró incrédulo.
— Me temo que sería imposible — dio el primer paso, con su corazón golpeteando fuertemente contra su pecho, casi como un reclamo, recordando débilmente la sensación de hasta hace unos días, esa misma ansiedad —. Sospecho que tienes una idea muy equivocada sobre mi, Iruka.
— ¿Cómo por ejemplo?
El castaño sonrió.
— Creer que sería capaz de contenerme.
..
¡Aquí capítulo! Siento la tardanza, como ya sabréis, las cosas han estado un poco revueltas últimamente. ¿Y vosotros, qué tal lleváis la cuarentena? Espero de verdad que os encontréis bien, por lo pronto tened mucho cuidado, ¿vale? En unas horas subiré la continuación, no os preocupéis, que ya está preparada.
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