La bondad y rectitud de una persona no siempre causa admiración, la mayoría de las veces provoca celos y envidia, no importa cuanto se esfuerce una persona, siempre habrá aquellos que con comentarios mordaces, murmurando entre las sombras y maldicie...
"¡Ey!, pequeño dormilón, ya es hora de levantarse, se nos hará tarde para empezar el día y hoy tenemos mucho trabajo que hacer" Una suave voz pronunciaba con una paciencia que parecía infinita, igual a aquella que utiliza un padre para enseñar a un hijo.
"Vamos abre los ojos" Seguía murmurando la tranquila voz, sintió como una mano se posicionaba en su cabeza, acariciando con total delicadeza, se sentía como el paraíso y mas cuando la delicada mano se poso detrás de sus orejas, se sentía tan bien.
¿Eh? Si mal no recordaba sus orejas se encontraban a los costados de su cabeza no sobre ella, abrió de golpe los ojos ante esta realización, nuevamente olvido su condición actual, cuando pudo enfocar su vista pudo darse cuenta que frente a el se encontraba un sonriente Líder de secta que seguía acariciándolo, al parecer la escena le parecía muy divertida por que siguió sonriendo por un poco mas de tiempo.
"Báiyù, vamos a desayunar, son mas de las ocho y hoy tenemos trabajo pendiente" El de purpura se dirigió de inmediato a la puerta, al abrirla volvió a voltear hacia su nuevo compañero de habitación, solo le basto hacer una seña para que el pequeño bribón saltara de la cama y se dirigiera hacia donde el se encontraba.
"¿Dormiste bien?" El acompañante de cuatro patas lanzo un ladrido como afirmación, aun no podía creer que había dormido tan bien que incluso se había despertado ha una hora tan impropia.
"Desde que entre en reclusión no había podido dormir adecuadamente, las pesadillas acudían a mi cada noche, pero parece que esta vez gracias a Wanyin yo...¡ehh! ¿Que fue lo que dije? ¿Como puedo ser tan desvergonzado de llamarlo por su nombre cuando no se me ha dado permiso? Yo-yo me estoy convirtiendo en alguien como el maestro Wei, noooo, todo menos eso, ¿Que dirá tío cuando si se llega a enterar de mi desfachatez?" Agradecía a los dioses que ahora mismo fuera un perro por que sentía como su rostro quemaba de la vergüenza a causa de sus desvergonzados pensamientos hacia El Líder de secta Jiang.
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El desayuno transcurrió en una relativa paz, no estaba acostumbrado a que se hablara durante las comidas, pero no le molestaba era relajante ver a ambos lideres actuar simplemente como tío y sobrino.
"Tio ¿Es cierto que vas ayudar a Wei Wuxian?" Dijo el menor.
"Di mi palabra y es algo de lo que jamas me he retractado, empezaremos a buscar esta misma tarde" Báiyù estaba atento, sabia que era de mala educación y una vez mas en contra de las reglas escuchar conversaciones ajenas, pero le pareció imposible no escuchar cuando el tono del de purpura había sonado tan serio, quería saber lo que ocurría.
"Tio, eso es algo que los de su secta deberían hacer, por lo que escuche de Sizhui y Jingyi no ha habido mucho movimiento" El mas joven no creía que su tío debería meterse en problemas de otra secta.
"A-Ling, el Líder Lan ha estado ya en reclusión por unos años, en ese tiempo tanto el consejo de ancianos como el maestro Lan Qiren han podido mantener una secta fuerte en la que Zewu-jun es líder pero solo de nombre, hacer un alboroto en este momento los haría parecer débiles y necesitados de su líder, sabes muy bien que hay muchos que ambicionan el puesto mas alto en una secta, el de líder, por ahora Hanguang-Jun seria el mas apropiado para seguir manejando la secta, pero el que este casado con el ex-patriarca Yilin es algo que pueden usar para usarlo en su contra, por eso mismo debemos encontrar a Zewu-jun, una vez encontrado podremos deshacernos de los culpables y azotar sin piedad a ese estúpido líder para hacerlo entrar en razón y que tome de nueva cuenta su puesto, eso nos hará las cosas mas simples ¿No crees Báiyù?" No se había equivocado ¿Cierto? El claramente le dijo estúpido y que lo azotaría para hacerlo entrar en razón, no quería saber que le haría si se llega a enterar que con quien a estado es con ese <<estúpido>> como le acaba de llamar de seguro lo mataría.
"Tio, realmente eres valiente solo tu golpearías a una persona sin importar su titulo, ademas por lo que me has dicho tengo que mantener silencio ¿Verdad?" El mayor solo asintió.
"Esta bien tío, pero promete que tendrás mucho cuidado, no quiero que vayas a sufrir ningún incidente mientras ayudas a tu amigo, si necesitas ayuda vendré de inmediato y estaré atento por cualquier información que te pueda ser útil" Su sonrisa era brillante aun cuando el mayor tiro fuertemente de sus mejillas.
"Mocoso malagradecido, veras lo que te pasara si vuelves a escapar de tu trabajo" Ahora era el menor que intentaba asentir.
"Tio, me marcho, en cuanto tenga tiempo vendré verte y si no es así, ven tu a verme, sabes que tienes las puertas abiertas" Sin ninguna clase de aviso abrazo a su tío este al principio estaba algo rígido, pero con forme paso el tiempo se fue relajando y correspondió aquel abrazo.
"Cuídate A-Ling, ahora que no tengo que hacer tu trabajo puede que tenga tiempo para hacerte una visita" El menor hizo un puchero, pero de inmediato asintió.
"También trae a Báiyù contigo o de ser posible a una futura tía para mi" Antes de que su tío pudiera usar Zidian Jin Ling ya se encontraba muy lejos de ahí, mientras una sonrisa se formaba en los labios de Jiang Cheng.
"Hermana perdóname pero creo que convertí a tu hijo en un granuja, aun así, es un buen granuja" Su sonrisa se hizo mas ancha.
El pobre de Báiyù estaba en una disyuntiva ¿Como decirles que el era Lan Xichen? Su hermano posiblemente no se acercaría a el mientras su esposo estuviera con el, debía encontrar una manera de poder alejarlo lo suficiente para ver si lo podía reconocer, mientras mas pronto volviera a la normalidad, regresaría a su verdadera forma y podría regresar a su secta...regresar a su secta, por que la idea ya no lo emocionaba, era su casa, donde se encontraba su familia, por que dejar este lugar de pronto le pareció tan imposible.
