Matar a Cenicienta [COMPLETA]

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Cenicienta no era mala persona, solo no le gustaba que fuesen mala con ella. Sabía cómo tratar a los demás, sino, pregúntenle a las cabezas de muñeca que había clavado en su habitación. Siempre les cantaba antes de irse a dormir para que Kahuma les hiciera compañía y les diera lindos sueños.

Cenicienta no sabía quién era Kahuma ni por qué le gustaba tanto darle órdenes, pero un día había llegado, se conocieron, y al siguiente ya eran mejores amigos y Cenicienta hacía todo lo que le decía.

Claro, que no se puede decir que "se conocieron" si ella nunca lo había visto, por eso, ella tomó un peluche al cual le había arrancado los ojos en un berrinche de pequeña, y le dijo a Kahuma que hablara por su boca para poder imaginárselo mejor.

Desde entonces se lleva el peluche a todas partes.

Cenicienta acariciaba la mano amputada que reciéntemente había sacado de su cajita mágica. Sentía la piel gomosa, la irregularidad de la superficia gracias a la hinchazón de las venas, sentía el frío antinatural de la piel muerta haciéndole cosquillas.

La mano la reconfortaba, la hacía sentir segura, como si nadie pudiese hacerle daño mientras la tuviese encima.

Es bastante gracioso que el príncipe llorara cuando se la arrancó, teniendo en cuenta que parecía tan inquebrantable al decirle que ni siquiera en sus sueños se casaría con una mujer tan rara como ella.

—¡Cenicienta, otra vez no! —le gritó Gustavo, su mejor amigo, al entrar corriendo y arrancarle la mano que se mantenía acariciando como si estuviese en estado de hipnósis.

Cenicienta se reía. Gus no pudo entender cómo se las había arreglado para conseguir que la mano muerta siguiese sangrando, pero lo hacía, y de las uñas de Cenicienta manaban gotas espesas. La chica se pasó la mano por la cara, rascándose, dejando así la mitad de su rostro de un blanco perpetuo, casi de muerte, y en la otra cuadro senderos carmesí como si una fiera hubiese limpiado ahí sus garras después de un salvaje almuerzo.

—Guardaremos esta mano, Cenicienta —Gustavo se arrodilló frente a ella— y no le diremos nada a tu madrastra todavía. ¿Richard habló?

—El príncipe, Gus, más respeto para tu monarca.

A Gus siempre le había sorprendido que su amiga escogiese al hijo de un carnicero para volverlo "su príncipe". Era indignante.

—Sí, Cenicienta. El príncipe. ¿Dijo algo?

La muchacha negó con la cabeza, sonriendo como dentro de una fantasía. ¿Quién le creería, de todas formas? La palabra del hijo de un carnicero contra la heredera del difunto alcalde del pueblo. Era una locura.

Pero esto no podía seguir así, era demasiado. Primero, dejaba calva a sus hermanas porque su amigo imaginario le dijo que se estaban burlando de su cabellera cuando las mellizas Ana y Gris no hacían más que alagar los mechones dorados de su hermanita.

Gus tuvo que echarse la culpa para que no regañaran a Cenicienta.

Después, lanzaba por las escaleras a su nana madrina porque su peluche le dijo que era su hada y que sabía volar.

Gus tuvo que decir que se había tropezado con ella persiguiendo al gato.

¿Y qué hacía Cenicienta al respecto? Conseguía al primer don nadie de la esquina y le cortaba la mano.

Tenía que pedirle que parara, pero esta vez con firmeza

—Gus, para mi cumpleaños quiero hacer un baile.

Esto dejó por completo fuera de sí mismo al pobre Gus. ¿Será que su amiga al fin estaba dando muestras de querer socializar?

—Sí, a Kahuma le gusta la idea. Pero quiere que sea... una sorpresa. ¿Me ayudarás con las invitaciones? Quiero darle una al príncipe también. Y su padre. El rey ha sido muy amable conmigo.

Gustavo tenía un nudo en la garganta presionando con fuerza, su mejor amiga no tenía cura. ¿Qué estaría planeando ahora?

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Nota de autora:
Como he visto mucha confusión al respecto, decidí agregar esta nota.

La historia NO termina aquí, y la saga menos. Esta historia fue retirada por su publicación en papel dentro del libro "Érase una vez un crimen", publicado por Mangata Ediciones. Pueden conseguir toda la información en http://www.mangataediciones.com

La siguiente entrega de la saga se publicará pronto, así que no crean que se acabó esto de jugar a los detectives en Wattpad. Además, todavía está disponible "La masacre de Nunca Jamás".