11

542 34 5
                                    

"¿No sabes nada de ellos?". La nipona alzó la mirada al escuchar la voz de Russel acercándose a la cocina. 

"No" el baterista chistó. "Pero están bien"

"¿Cómo lo sabes?"

"La última vez que llamé a Murdoc no sonaba tan mal" Russel frunció el ceño.

"Pero ya conocemos a Murdoc. Me gustaría poder confiar en él pero…" se interrumpió cuando escuchó el sonido de unas llaves abrir la puerta principal. 

"... Sí, y no te creas que fue tan caro. Sólo me cobraron cincuenta y tres dólares de aparcamiento" era la voz de Stuart. Ambos se asomaron para asegurarse de que realmente era él. Murdoc entró tras él con una sonrisa ladeada, pero cabizbajo. Se temía la tremenda bronca que Russel le iba a dar. De repente le faltó el aire, dándose cuenta de que lo estaban abrazando demasiado fuerte. Suspiró alzando los brazos para devolver el gesto. 

"No sabes cuánto nos preocupaste" le dijo Noodle mientras se separaba. 

"Lo siento"

"Pudiste habernos avisado de que no estabas bien" se quejó Russel.

"... Lo siento"

"Está bien. Me alegro de que estés mejor" Stuart sonrió, acercándose a Murdoc. 

"Voy a descansar. Hoy madrugamos mucho. ¿Vienes?" le preguntó el peliazul cogiéndolo de los hombros desde atrás. 

"Sí"

"Más tarde hablamos" dijo arrastrando a Murdoc escaleras arriba. "Tengo una sorpresa para ti" le susurró al oído una vez estuvieron en la habitación de Stuart. Murdoc sonrió, temiéndose lo que era. "La última vez me reservé un pequeño juguete que pensé que te gustaría, pero no me dio tiempo a usarlo. Eres tan impaciente" Le dijo sacando una bolsa de la mesita de noche. Murdoc arqueó una ceja. "Túmbate, amor"

"Como quieras" dijo con una sonrisa pícara. Vio cómo Stuart extraía una pequeña caja de la bolsa, abriéndola. Primero sacó varios papeles y más tarde lo que parecía algún tipo de vibrador. Murdoc frunció el ceño ante la extraña forma de éste. "¿Qué es?"

"En seguida lo sabrás" Respondió sacando otro objeto. Murdoc conocía de sobra lo anillos.

"Mmm… ¿vas a ponértelo?" le preguntó mordiéndose el labio. Stuart sólo le guiñó un ojo. Se acercó a él dejando ambos artilugios en la cama, presionando sus labios contra los de Murdoc. El bajista lo aproximó aún más cogiéndolo por la espalda, ambos besándose lentamente. "Ya estás caliente? ¿Tan rápido?" rió al bajar la mirada.

"Hace mucho que no lo hacemos" se justificó. Murdoc se recostó en la cama, esperando a que Stuart se lanzara sobre él, bajando sus manos por los costados desnudos del otro, apreciando cómo su piel se ponía de gallina y sus pezones se endurecían, excitado. "Eres tan bello, Murdoc" susurró acercando su rostro. Murdoc ahuecó las mejillas de Stuart, besándolo suavemente, ambos meciéndose al ritmo lento del beso. "Te amo" dijo bajando el beso al cuello del otro. Llegó con parsimonia a uno de los pezones de Murdoc, todavía erectos. Gimió al sentir la tibia y húmeda lengua de Stuart sobre él, besándolo. Repartió pequeños besos por el cuello del otro, retirándole el suéter por completo. Sus labios bajaron por las clavículas y pecho de Murdoc, más tarde a su abdomen y vientre, provocándole dulces escalofríos. "Aunque tú tampoco puedes burlarte…" susurró. Murdoc rió. 

"¿Puedo ponerte el anillo?" preguntó mirándolo de una manera demasiado adorable para Stuart.

"Cómo negarme…" jadeó acercando el lubricante. Murdoc cogió el anillo y esperó a que Stuart se desnudara para luego echar una gran cantidad de lubricante sobre su erección. Comenzó a deslizarlo lentamente, apreciando cómo se dilataba a medida que lo resbalaba cada vez más hasta llegar a la base. Stuart tembló ante la presión que le provocaba. "Mi turno" sonrió. "Túmbate" Murdoc obedeció y esperó impaciente a que Stuart hiciera algo con aquello. Abrió las piernas del azabache, introduciendo lo que parecía un vibrador con lentitud, ya estando lubricado. Murdoc gimió ante la extraña textura de éste. Era suave y extrañamente cómodo. Stuart agarró el papel que había retirado de la caja anteriormente, leyéndola.

"Descubre el placer que aporta el masaje prostático directo con el Power Probe de Dr Karplan", leyó, "con una superficie no deslizante que garantiza un fácil control incluso con las manos llenas de lubricante, este vibrador de dos velocidades masajea tu punto P y te lleva hasta unos orgasmos alucinantes… ¿será cierto?" Murdoc notó al instante una sensación estremecedora en su interior. Si Stuart movía aquello sentía que podría correrse. "La cabeza fina y en ángulo del masajeador prostático de Dr Joel Karplan hace que la inserción resulte fácil y sin molestias al mismo tiempo que el grueso cuerpo y la cónica cintura ofrecen una comodidad total" prosiguió, "... La cabeza curvada acaricia tu próstata y dirige las vibraciones justamente a tus terminaciones nerviosas para llevarte hasta un nuevo nivel de frenesí orgásmico" Murdoc no pudo evitar gemir al ver cómo aquel folleto describía a la perfección lo que estaba sintiendo. "Presiona el capuchón de control del extremo e inicia la vibración excitante" y lo hizo, provocando que Murdoc alzara las caderas, increíblemente excitado, "presiona una vez más y aumentará la velocidad incluso más" 

"S-Stuart…" gimió, "voy a--" 

"Shhh. Todavía no" dijo volviendo a presionar el botón para detenerlo, aunque todavía estaba presionando su próstata de una manera casi inaguantable. "Debes esperar"

"Por favor" suplicó. "Quítalo por favor" Stuart lo retiró inmediatamente, teniendo cuidado de no hacerle daño.

"¿Qué pasa? ¿No te gustó?" le preguntó con preocupación a la vez que acariciaba el rostro del otro cariñosamente. Murdoc negó con la cabeza.

"No es eso… Es… demasiado" Stuart comprendió.

"Entiendo, entonces… ¿quieres que sigamos o..?"

"..."

"Está bien Muds. No quiero obligarte"

"Pero--"

"No pasa nada" Murdoc frunció el ceño, probablemente decepcionado consigo mismo por no complacer a Stuart. "Tranquilo amor, no voy a presionarte" le dijo. 

"Lo sé. Gracias" susurró acurrucándose en el pecho de Stuart. "Te quiero tanto…" 

"¿Te encuentras bien?" 

"Sí. ¿... Por?"

"Nada"

"Te dije que intentaría ser más cariñoso contigo" Stuart sonrió, besando su cabeza. 

"Y lo estás haciendo, amor" Murdoc frunció el ceño. "¿Mh?"

"... Todavía no estoy acostumbrado a que me llames de esa manera…"

"Es cuestión de tiempo. Ahora sólo descansa" Le dijo acariciando su cabello. Murdoc asintió con un suspiro, cerrando los ojos finalmente. ¿Cuándo se había ablandado tanto? Ni siquiera notó el momento en el que empezó a cambiar, pero supuso que era para bien. Deseaba que fuera para bien.






Me: "Intentaré no tardar tanto en actualizar"
Also me: tarda 16 días en actualizar, y encima lo hace con un capítulo de mierda.

Lo sieeento, pero traigo un bloqueo desde hace varias semanas que no puedo. Y más tarde corregiré las faltas de ortografía que pueda haber.
En fin.

<333

I Me Mine | studocWhere stories live. Discover now