"¿Por qué viniste a por mí?" Stuart le dio una calada al cigarro antes de responder.
"Estaba preocupado de lo que eras capaz de hacer si viajabas solo" Murdoc no dijo nada, pero entendió perfectamente lo que Stuart quería decirle.
"¿Cuándo supiste lo de tu hermano?" preguntó al notar que Murdoc estaba preparado para hablar de ello.
"... Harán… Tres días"
"No te llevabas bien con él, ¿no?" Murdoc suspiró, llevándose las manos a la cara. Quizá la había cagado.
"Él… no era el mejor hermano del mundo ni mucho menos, pero… bueno, era mi hermano y confiaba en él después de todo. Él me ayudó a conseguir mi primer bajo con la condición de que me aprendiera toda la discografía de The Clash," recordó sonriendo, "discutimos, pero teníamos nuestros momentos… buenos. Hablar con él era un alivio, era la única persona con la que podía mantener una conversación sin darme una paliza… y…" Stuart notó que su voz había comenzado a temblar, "... Ni siquiera pude disculparme o… agradecerle y--"
"Está bien Muds… estará orgulloso esté donde esté" Murdoc negó con la cabeza mientras dejaba que 2D lo acercara a él. Se sentía tan mal cuando Murdoc lloraba, era siempre silencioso, y le dolía pensar que era porque no sentía la seguridad suficiente para dejarse llevar.
"Es una mierda Stu"
"Lo sé, Murdoc, lo sé" susurró a la vez que acariciaba su cabeza. Stuart no sabía lo que era perder un hermano, pero se imaginó lo dolido que se encontraba el bajista al verlo llorar de aquella manera. Le pareció impactante que no derramara ni una sola lágrima por su padre, incluso en el funeral ni se inmutó, pero ese mismo día le contó su situación al detalle. Sabía que Murdoc había crecido en un ambiente abusivo, pero lo que él le contó salía por completo de su imaginación. Desde pequeño siempre escuchó las consecuencias del abuso infantil, pero tener el claro ejemplo viviendo bajo su mismo techo durante tantos años era demasiado. Supuso que para Murdoc, Hannibal era un pilar fundamental en su estabilidad emocional, pero hacía muchos años que no habían hablado. Murdoc parecía tener tantas cosas que decirle. "Tranquilo Murdoc, por favor, deja de llorar", pero el hombre no podía. Stuart comenzó a preocuparse, ¿qué era tan grave para que Murdoc llevara diez minutos de reloj llorando? "No llores más, Muds" susurró abrazando con más fuerza al mayor.
"... Lo siento…"
"No. No te disculpes. Tan sólo respira" Murdoc asintió con la cabeza. Tenía frío. Ni siquiera el abrazo de Stuart podía proporcionarle un mínimo de calidez. "Vamos a dormir, Muds. Es tarde" ambos se levantaron, todavía abrazados.
El hotel donde Murdoc dormía no estaba demasiado lejos, pero igualmente quisieron llegar lo antes posible y caminaron apresuradamente hacia allí. La habitación no era precisamente lujosa. Murdoc era más que consciente de los problemas económicos por los que estaba pasando la banda, así que se conformó con algo más bien barato. Stuart sólo había llevado una bolsa con ropa interior y camisetas, por lo que Murdoc tuvo que dejarle los pantalones de su pijama y él dormir únicamente con la parte de arriba.
Stuart escuchó al bajista suspirar desde el baño.
"¿Te encuentras bien?" preguntó levantándose de la cama.
"Sí. Cansado"
"Pues ve a dormir" pero Murdoc no parecía demasiado convencido. Stuart apoyó su cabeza sobre el hombro del más bajo, abrazándolo por la cintura. "No me iré a ningún lado" susurró.
"¿Lo prometes?"
"Lo prometo" entonces Stuart movió la pierna de Murdoc con su rodilla, obligándolo a caminar hacia la cama.
