Capítulo 22

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Narra Mina.

Luego de que Sana se fuera me quedé pensativa. ¿Cómo haría para disculparme con Chae?

Recordé que le había gustado la comida que le llevé el otro día así que pensé que sería buena idea cocinarle otra vez.
Me levanté del sillón y fui a la cocina .

Le haría otro platillo japonés. Oshi sushi.

Verifiqué que tuviera todos los ingredientes y me faltaba algo muy importante; el salmón.
Hice una pequeña lista de las cosas que necesitaría, incluyendo el pescado, y salí a hacer las compras. Cuando volví, prendí la radio y me puse manos a la obra.
No era una experta en la cocina pero viendo tutoriales y con un poco de práctica se aprende.

¿Que si practiqué?  Practiqué mucho, de hecho me mantuve el resto de la tarde peleando con el salmón. También se me dificultó el tema del arroz, o se pasaba de cocción o le faltaba. Luego darle forma y el armado, joder.
Ya que estaba, decidí hacer directamente la cena.
Una vez terminado el platillo, agarré un tapper y guardé algunos "cuadraditos" dentro. Solo esperaba que le gustase.

—Mina ya llegué —Oí la voz de mi madre.

Entró a la cocina y casi se desmaya.

—¿Qué es esto Mina?, ¿hiciste la cena?, ¿te sientes bien? —Rodé los ojos.

—Hola mamá. ¿Estás insinuando que nunca hago la cena?

—De hecho es la primera vez que te veo cocinar sola y que nos esperas con la comida hecha. Espera, iré por la cámara —¿Eh?

—Alto.

Salió y volvió con la cámara. Ugh.

—A ver —Joder. Tomé el plato con el sushi y posé—. Tu padre se emocionará —Fingió sacarse una lágrima.

—"Qué graciosa".

—¿Hiciste sushi? —Se acercó a la mesa—. Vaya, no estaba al tanto de que supieras prepararlo.

—No sabía. Lo ví en Youtube —Me encogí de hombros.

—Se ve muy bien —Gracias—. Esperaremos a tu padre, no debe tardar en llegar.

Y así fue, media hora después nos sentamos los tres en la mesa a cenar. Tenía algo de tarea así que guardé disimuladamente el taper en el refri y subí a mi cuarto mientras ellos seguían conversando. Chequeé mi teléfono por si acaso milagrosamente hubiera recibido una llamada de Chaeyoung pero nada. Nada de nada.

Terminé mi tarea y me acosté. Debía pensar qué palabras usaría para disculparme. No estaba acostumbrada a pedir disculpas, simplemente solía decir "lo siento" y ya, pero Chae es... es distinta.

Al día siguiente me levanté entusiamada. Vería a Chae, a mi linda novia.

Me alisté y bajé a buscar el tapper, lo envolví y guarde en mi mochila.

—¿Y cómo van las cosas con Chaeyon? —preguntó de repente mi padre mientras desayunábamos. Guat?

Casi escupo mi tesito.

—E-es Chaeyoung. ¿Mamá te contó al respecto?

—Sí, lo hizo. Admito que me sorprendí al principio pero si te hace feliz y mientras no sea una holgazana —Es un frijol—. Dime, ¿cuántos años tiene?

—Tiene mi edad, dieciocho —Pero parece de quince—. Es muy agradable —Y testaruda.

—Ya veo. Y... ¿Cuándo nos la presentarás? —habló bebiendo su cafesito como vieja chismosa.

𝐃𝐞𝐚𝐫 𝐌𝐲 𝐁𝐨𝐨...! (𝐌𝐢𝐂𝐡𝐚𝐞𝐧𝐠)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora