6) Gracias universo

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Una vez salgo de la escuela le pedí a Dylan el favor de que me llevará a casa lo más pronto posible para poder  hablar con mi madre más detenidamente del asunto. Por suerte cuando Dylan me llevo a casa no me hizo ni una sola pregunta, es más, para evitar que se creará un silencio incómodo entre nosotros encendió la radio de su auto y colocó música.

Es algo que le agradecí internamente.

Cuando entre a la casa encontré a Marcos y a mi madre en la cocina hablando muy serios, no hacía falta ser adivina para saber que estaban hablando del señor Joan.

— ¿Dylan te contó? — Me pregunto mi madre apenas me vio entrar a la cocina.

Dijo mi mochila en el sofá de la sala y me siento en unos de los taburetes de la cocina junto a Marcos.

— Si.

Marcos pone los ojos en blanco fastidiado — ¿Aún no entiendo por qué mierda las personas de la calle siempre tienen que enterarse de lo que ocurre en esta casa por culpa de Amy? — como odiaba que tomará esa actitud.

— primero y principalmente — lo mire de mala manera — no es tu problema y segundo, si no es por eso no me hubiera enterado de nada hasta a ahora.

Mi respuesta parecio molestarle más — Si es mi problema por que esto también me involucra a mi — aclaró ignorando lo demás que le dije  — y que sea última vez que me hablas así, recuerda que soy tu hermano mayor, merezco respeto.

— respeto y una mierda, ¿Acaso tu me respetas?

Un sonido seco producido al golpear el mesón de la cocina logró asustarme ya que me tomo desprevenida, en cambio a Marcos ni reaccionó.

Los dos giramos a la fuente de ese sonido rápidamente.

— ¡Dejen de pelear ya! — exigió mamá notando que ella fue la que golpeó el mesón con su palma — No es momento que se pongan a pelear por estupideces, ¡Ya basta!

Marcos y yo nos cruzamos de brazos aún molestos.

Mamá suspiro — a ver... — se froto los ojos demostrando que ya estaba cansada — Su padre apareció de nuevo, esta vez me quiso citar a un juzgado para reclamar el derecho de poder verlos.

Fruncí el ceño — por Dios — Bufé — creo que tenemos la suficiente edad para elegir si quieres verlo o no.

— Si pero tu padre piensa que yo soy la que les prohíbe a ustedes que lo vean.

— Si claro, por que el piensa que luego de que nos abandonó, nosotros lo íbamos a recibir como si nada hubiera pasado — Habla Marco tenso — además, creo que un juzgado no intervienen en este tipo de caso.

— No lo hace, sólo que su padre es un retrasado que no piensa en las locuras que dice.

— No digas "su padre" — pedí cansada haciendo un además de comillas — él ya perdió ese derecho.

— bueno, Joan — dijo cansada antes de tomar una actitud muy seria — sepan que ustedes tienen derecho de decidir si quieren verlo o no, por lo que les pregunto ¿Quieren verlo o hablar con él?

— No, de ninguna manera — respondí decidida apenas pregunto — No pienso perder mi tiempo en hablar con personas que no lo merecen.

— yo si siquiera — respondió Marcos luego de pensarlo por unos segundos.

Lo mire indignada — No me jodas Marcos.

— Amy, controla tu vocabulario — Me corta mamá de una.

— ¡No!, ¿Cómo que quieres hablar con ese hombre? — Me pase las manos por el rostro frustrada — ¿Te haz vuelvo loco?

— solo quiero saber la razón por la cual nos abandonó sin siquiera pensarlo dos ve— me intento decir pero lo corte.

Dime "Te amo" (pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora