25

62 10 3
                                    

Regresamos a Seúl y Jongdae no estaba muy bien que digamos, por lo que decidí no marcarle ese día, simplemente esperar hasta que él estuviera más tranquilo.

Pasaron varios días y Jongdae no iba al apartamento, sólo hablamos por celular y por mensajes. Fue ahí cuando me di cuenta que realmente le afecto ver a su papá. Quería ayudarlo de alguna manera, así que contacte a Jin, él amigo con el cual Jongdae vivía. Quería ir a verlo, cocinarle algo y pasar un tiempo con él.

Decidí parar en un supermercado cerca para comprar las cosas necesarias para la cena. Pero nunca pensé que encontraría a alguien que daría un giro de 360° a mi vida.

Buscaba unas pastas cuando una persona un poco  más alta que yo se acomodo a mí lado. Gire a verlo y era él. Sabía perfectamente que la silueta que vi aquella vez en el otro supermercado con Jongdae era él. Podría reconocerlo.

—Hola Minseok.—Me dice sonriendo.

—Luhan.—Nunca creí volver a mencionar su nombre, sentí un escalofrío por mi cuerpo.

—Supongo que no es la mejor manera ni el momento.

—No, no lo es.—Respondo rápidamente.

—Entiendo que estés así conmigo.

—¿Lo entiendes? —Oh no Minseok, aquí vas otra vez.—¿ Que entendiste? ¿Qué tuviste sexo con tu amigo? ¿Qué no te importo lo que yo sintiera? ¿Qué lloré cómo un maldito por ti todas las noches mientras tu estabas en China o África? Porque la verdad nunca tuviste la decencia de siquiera hablar conmigo Luhan. Solo te fuiste.

Sentía que en cualquier momento iba a volver a llorar pero no. No quería que el viera lo frágil que me había puesto después de lo que hizo.

—Minseok sabes que lo nuestro...

—¿Lo nuestro? Lo que tú echaste a perder Luhan. Te voy a ser sincero, me dolió hasta el alma todo lo que me hiciste, estaba loco por saber que había hecho mal ¿Puedes creer? Me culpe por algo que no hice. Aún así estuve a punto de irme a China y buscarte, ¿Porque? Porque te necesitaba, te amaba Luhan.

—¿Tú crees que no me arrepiento? Minseok después de todo lo que te hice me di cuenta que era solo un capricho mío y que realmente tú eras todo lo que necesitaba.

—Pues no parecía Luhan.—Tomé la canasta del piso y me retire del lugar. Fui a pagar las cosas en una caja rápida, quería irme lo más rápido posible del lugar. Necesitaba controlarme. Hubo un tiempo en el que llegué a pensar como sería mi encuentro otra vez con él, porque el mundo es muy pequeño y sin darnos cuenta en algun momento de nuestra vida damos de nuevo con esas personas que una vez juramos ya no volver a verlos. Y bueno este caso lo mio fue con Luhan.

Él lamentablemente me conocía perfectamente, puedo llegar a decir que casi al mismo grado que Junmyeon. Es por eso que me contuve demasiado estando enfrente de él. En este momento mi única importancia en mi vida era Jongdae. Nadie más.

Conducí al rededor de 20 minutos para llegar al centro de Seúl, donde estaba el apartamento de Jin.

Al llegar Jin sale del edificio y se acerca a ayudarme.

—Hola, ¿Cómo estás?

—Hola, todo bien.—Tomo una de las bolsas y él hace lo mismo.—¿Vas a salir?

—Oh si, iré con Mina a comer pero ahí esta Dae.

—Oh ya.

Subimos al departamento y al entrar dejamos las cosas en la sala.

—Tengo que irme, después llegaré tarde.

Se despide de mi y sale del departamento el cual es muy grande. Todo está en silencio y camino hasta la habitación de Jongdae, pero no está solo.

Miro a Jona, que está sentado en la cama mientras Jongdae estaba recostado. Ambos me miraron. Quería entrar a la habitación y hacer un espectáculo como debía pero no. Simplemente me di la media vuelta y salí del lugar.

Baje las escaleras lo más rápido que pude, al llegar al carro sentí una mano tocar la mía.

—Hey, ¿A donde vas?

Era él.

—Yo no quiero interrumpir y solo quería venir a verte un momento pero si estás ocupado.—No podía mirarlo a los ojos.

—Minseok, no pasa nada.—Giro a mirarlo, maldición.—Solo vino a traerme un encargo de Chanyeol.

—Que bueno, me tengo que ir. Ahí te deje algo de comida que pensé que podríamos hacer juntos.—Ambos nos quedamos en silencio, sentí mil punzadas dentro de mí.—Adiós.

—Minseok.—Es lo único que logro escuchar una vez que entró al carro, quería llorar, quería irme de ese lugar. No fue la mejor opción pero no necesitaba más dolor en mi vida. No después de haber visto a Luhan y con esto, yo necesitaba un espacio. Probablemente lo mejor hubiera sido reclamarle el porque estaba ahí, que hacía Jona en Seúl. O tal vez la más importante, porque nunca me llamó. Pero no quería hacer nada. Simplemente maneje directo a la casa, donde seguro Junmyeon ya estaría ahí.

Baje del auto y camine a la pequeña plaza que estaba cerca. Necesitaba tomar aire fresco. Tal vez lo de Luhan me pego tanto que no fui capaz de procesar lo de Jona y Jongdae. O tal vez recordé cuando vi a Luhan con su amigo, en esa habitación, teniendo sexo. Esto era una especie de deja vu, ¿Es posible eso?

Mis ojos no soportaron más y comencé a llorar, las lágrimas salían demasiado rápido, creo que después de tanto tiempo esto era lo que necesitaba. Llorar. Comencé a recordar todo, lo mío con Luhan, tal vez aún no estaba completamente cerrada esa parte en mí.

—¿Estás bien?—Giro y ahí estaba Tae.

Niego con la cabeza y él se sienta a mí lado. Toma mi mano y me mira.

—Lo siento.—Es lo único que logro decir.

—Todo esta bien Minseok, llora todo lo que quieras, aquí estoy. Estoy contigo.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Aug 27, 2019 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

El chico de la gorra [Chenmin/Xiuchen] Where stories live. Discover now