Capítulo 08

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Itachi, el prodigio del clan Uchiha formaba oficialmente parte de los ANBU.

La noticia fue como una chispa en un almacén de pólvora. Durante un año el rumor de que se estaba considerando su candidatura fue parte común de las charlas de los enmascarados, pero era sólo eso, un rumor. Muchos pensaban que nunca se le aceptaría dado los roces que existían entre la Policía Militar de Konoha y los ANBU. No hubo un anuncio oficial, ningún enmascarado era presentado a todo el resto, solo a su equipo y a los cargos más altos, pero eso no impidió que el día que se le aceptó a las pocas horas todos los miembros estuvieran enterados.

―Exageran ―comentó Yugao, incómoda por la atención que se prestaba a la noticia. En el usualmente silencioso cuartel de los ANBU podía sentirse el murmullo generado por el chisme.

―¿En serio? ―cuestionó Tenzou desconcertado por sus palabras―. Es un Uchiha, y no cualquier Uchiha, es el hijo de Fugaku-sama, será la próxima cabeza del clan.

―Es casi un evento histórico ―bromeó Kitou con una media sonrisa―. Es primera vez que un miembro de un clan tan importante se nos une ―clarificó ―. Han habido Hyuugas, pero todos de la rama secundaria.

―Eso no importa ―se quejó ella chasqueando la lengua. Comprendía la importancia del muchacho dentro de la aldea, pero al ponerse las máscaras los ANBU perdían su identidad, al menos dentro de las misiones―. Lo que no entiendo es por qué le asignaron una misión con Kakashi senpai y nos dejaron a nosotros excluidos.

―¿Celosa que nos reemplacen? ―cuestionó Kitou sumamente divertido―. Quizás deberíamos advertirle a Hayate ―agregó dirigiéndose a su compañero.

―¡Claro que no! ―aseguró Yugao fuertemente. Respetaba y admiraba a Kakashi, sólo eso, y le incomodaba que malinterpretaran sus sentimientos aunque fuera para hacer una broma―. Un Uchiha no vale lo que nosotros tres ―añadió con indignación.

Kitou y Tenzou la observaron y sus expresiones alegres se borraron. Era posible que ese Uchiha específicamente si pudiera reemplazarlos, al menos por todo lo que habían escuchado. Itachi tenía un espectacular historial de misiones, en todas destacaba y además las pruebas para ingresar a los ANBU las completó a la perfección y en tiempo record.

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Debían de tener mucho cuidado, un ligero descuido y podían desencadenar un conflicto diplomático. La misión era sumamente delicada: espiar la reunión entre un emisario del país de la hierba, nación aliada de Konoha, y un emisario del país de la Tierra. El encuentro sería en un pueblo fronterizo entre ambas naciones, muy cerca a las ruinas del puente Kannabi, lugar que fue clave para el fin de la tercera guerra y donde Uchiha Obito perdió la vida.

Era primera vez que Kakashi se acercaba tanto al nefasto lugar desde el evento en que perdió a su amigo. Los recuerdos invadieron su mente, pero el tiempo había hecho su labor, el dolor ya no era tan grande. Podía controlarlo, en cuanto se infiltraran no dudaba que su cerebro se enfocaría por completo en la misión.

Itachi se desplazaba a su costado, a pesar de tener el rostro cubierto con una máscara de ANBU podía percibirse que estaba sumamente tranquilo. Kakashi no sabía si sorprenderse o preocuparse, era la primera misión ANBU que realizaría y sólo en compañía de un capitán.

Al llegar al inicio de los campos de cultivo que rodeaban el pueblo que tenían como objetivo se detuvieron y observaron detenidamente los alrededores. Lo mejor era ingresar por la puerta principal, disfrazados. Sólo necesitaban encontrar un par de civiles a quienes reemplazar.

No les tomó demasiado tiempo encontrar unos granjeros que estaban retornando al pueblo. Kakashi se acercó con rapidez y los inutilizó con su sharingan. Luego de tomar sus apariencias y conseguir que tuvieran una conversación donde relataran algunos datos sobre ellos, los envió por una ruta poco transitada al pueblo vecino para que se quedaran ahí unos días de 'vacaciones'.

Last mission [Kakashi Hatake]Where stories live. Discover now