PRÓLOGO

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Sonrio a todos y respiró hondo antes de ponerme a andar hacia ellos, hacia la corona y hacia mi nueva vida.  

Cuando llego Niall me sonríe. Se ha pelado, yo no tiene melena, lo tiene justo como lo conocí, en el instituto-universidad, antes de que todo se liara y casi todos fueron controlados. Parece que fue hace tanto. Casi un año. 

Ville y Niall van vestidos muy parecidos, traje de chaqueta, camisa blanca y corbata negra. 

A Niall no se le ven los tatuajes de sus brazos. 

-Hoy -comienza Ville, dirigiéndose a todo el mundo- estamos aquí para coronar a Delia Donovan como reina. Después de meses de sufriente con una mujer que se proclamo reina ella misma, que nos controlo a su antojo y nos lo hizo pasar fatal, apareció Delia, ella lucho con todas sus fuerzas contra eso, y lo consiguió. Y todos le estamos tremendamente agradecidos. -Ville me lanza una mirada de agradecimiento.- así que hoy la coronaré, la coronaremos, y ella nos reinara. Sera nuestra guía, una madre, nuestra cuidadora. 

Todos aplauden con el discurso de Ville y yo tengo una sonrisa clavada en mi mente. 

-Acércate Delia. 

Me coloco justo enfrente de Ville y lo miro a los ojos, el me sonríe. 

Saca de la vitrina la corona. Dorada con pedrería rojo sangre. 

Inclino mi cabeza y miro hacia el suelo. 

-Con el poder que ha sido concedido a mi familia por generaciones te corono y nombro reina. -dicho esto Ville coloque en la cabeza la corona. 

Me pongo derecha y me topo con la mirada de Niall, colocado justo al lado de Ville. Le sonrío. 

-Os presento a Delia Donovan, nuestra reina. 

-¡Larga vida a la reina! -gritan a coro. 

Yo miro hacia ellos y sonrío agradecida. 

Ville me coge de la mano y me sitúa a su lado, al otro lado de donde esta Niall. 

-Colócate enfrente mía Niall.

Y todo lo que he hecho yo, lo hace Niall. 

Desconecto mi mente sin escuchar nada de lo que pasa. 

-¡Larga vida al rey! -gritan a coro. 

Niall sonríe con la corona puesta en su cabeza, es más grande que la mía y tiene pinta de pesar más, y también tiene pedrería roja. 

Cuando termina la coronación todo el reino empieza a celebrarlo. Suena música en todos los lugares y esquinas del reino. Todo el mundo baila y el reino se llena de luces. 

Estoy sentada en un banco de los jardines de palacio con Selene, Lydia y Lissi. Hablan de lo bonita que ha sido la coronación y lo guapos que estábamos Niall y yo. Yo les sonrío y hablo con ellas entusiasmadas. 

A las diez de la noche empezara una cena que vamos a hacer para celebrar nosotros la coronación, amigos y familiares íntimos. Así que hasta esa hora no hay mucho que hacer. 

-Chicas vuelvo en nada. Tengo que ir un momento a mi habitación. -comento.

-Bien, aquí te esperamos. -dice Selene. 

-¡No tardes! -me grita Lydia cuando ya he empezado a caminar hacia la entrada de palacio. 

Me agarro el vestido para evitar arrastrarlo y ensuciarlo hasta que llego a la puerta. Los guardias hacen un leve reverencia y abren la puerta. Cuando entro, las cierran. 

Vago por pasillos de palacio en busca de mi habitación. 

Es raro, llevo aquí dos meses viviendo y todavía no me acostumbro a estar entre tanto lujo y cosas grandes... no lo siento como mi hogar. Espero acostumbrarme y poder llamar hogar esto. 

Es todo tan lujoso, tan llamativo, tan grande. Seguramente no me acostumbre nunca. 

Llego a la puerta de mi habitación y entro, cerrando la puerta detrás de mi. La habitación ya esta completamente ordenada, la habrán limpiado en cuanto me fui. Odio que hagan las cosas por mi, y se esta volviendo una rutina. Eligen la ropa que voy a llevar, los zapatos que me tengo que poner, el maquillaje que debo usar, los gestos que debo hacer. 

Bueno, pero al menos estos dos meses han ido bien. 

Me siento en la cama sumida en mis pensamientos. 

No ha habido disturbios, problemas u hambre en ningún lado. Todos los días le pregunto a Ville. Dice que todos los lugares están siendo reconstruidos y nadie esta pasando hambre. No hay guerras o discusiones, todo va muy bien. 

Nadie pasa hambre, todos son tratados por igual, humanos y hombres lobos viven juntos en armonía. 

Me doy una última mirada en el espejo de mi habitación y me planto una sonrisa en la cara, siempre tengo que llevar una sonrisa y parecer tranquila, eso le gusta al reino me dijo Ville pocos días después de empezar a vivir en palacio. 

Salgo de la habitación sintiéndome mejor. Necesitaba unos minutos para estar sola. 

Recorro otra vez el camino de vuelta y salgo de palacio. Allí me esperan las chicas. Supongo que charlaremos hasta que empiece esa cena de celebración. 

¡Aquí tienen el prólogo! Espero les guste. 

Voten y comenten.

JULY.

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