Presa Por Casualidad - Camren [Traducción]

Capítulo 6

Camila tuvo el resto del día tranquilo en la medida de lo posible, tomó su baño sin molestar a nadie, ni siquiera había visto a Jauregui en aquel horario y las otras reclusas tampoco molestaron, sin embargo, su miedo aún se basaba en Beatrice. Ella saldría en pocos minutos de la detención e iría a su celda.

Camila se levantó cuando vio que sería registrada. Todo ocurrió bien y el horario llegó. La misma sonrisa prepotente de la noche anterior jugaba en los labios de la otra chica.

- ¿Me extrañaste? - Ella preguntó, acercándose.

-Por favor, déjame en paz. Yo no te hice nada. -Camila dijo, un poco más temerosa de lo que le gustaría. Estaba cansada de luchar, sin embargo, sabía que todavía tenía mucho más por delante.

-Sabes que quedarme en un cuarto oscuro por veinticuatro horas no me gustó mucho, no? - la mujer dijo, viendo a Camila levantarse e ir a la esquina de la pared.

- No quería ...

- Basta de hablar. - Dijo la chica, tirando de Camila por la cintura con fuerza. La más pequeña intentó soltarse, pero la mujer inmovilizó sus manos y presionó su pelvis contra la de la más pequeña, sin permitir que pudiera patearla. - Tu piel es muy suave. - murmuró la chica, distribuyendo besos alrededor de su cuello.

- A Lauren no le gustaría eso. - Dijo Camila en su impulso, cerrando los ojos con fuerza y, como por arte de magia, la mujer se alejó, confundida.

- ¿Qué tiene ella que ver con eso? -  Beatrice preguntó y Camila respiró hondo. Tendría que decir esas palabras en voz alta, sería extraño, primero porque tendría que hacerlo parecer cierto, segundo porque no sabía hasta qué punto el otro soportaría esa mentira.

-Bueno, ella me eligió para, emm, ser la mujer, ya sabes, de ella. - Camila dijo vacilante, experimentando el extraño sabor de esas palabras en su boca y Beatrice entrecerró los ojos.

-- ¿Desde cuando?

-- Esta tarde. - Dijo firmemente y la otra paso su mano por su nuca, luciendo un poco desconcertado.

- ¿Crees que le tengo miedo? - Beatrice preguntó y Camila rápidamente lo negó.

- Yo solo, bueno, te lo advierto. - Dijo Camila, al ver que Beatrice todavía parecía escéptica.

- Hablaré con ella mañana, pero si esto es mentira, espero que sepas que no seré cariñosa mañana por la noche". Camila asintió y suspiró aliviada cuando la otra se subió a la litera y se calló.

Que Dios tuviese misericordia de ella, si descubriesen la mentira ella estaría en problemas .

[...]

El delgado cuerpo corria desesperadamente hacia la cafetería al día siguiente, buscando los ojos verdes. Tan pronto como la encontró, se dirigió hacia Lauren, sentandose en su mesa sin pedir permiso.

- Me dijiste que dijera esa mierda, así que por favor no vuelvas atrás tu palabra, de lo contrario estaré bien, bien, bien jodida. - Camila dijo exaltadamente.

- ¿Quién te dijo que te sentaras? -Lauren preguntó bruscamente.

- Yo solo ... solo necesitaba hablar contigo antes de, eh, Beatrice. - Dijo Camila mirando sus manos.

- Ya lo dijiste. - Lauren dijo fríamente y Camila suspiró, asintiendo y levantándose.

- Lo siento, no quise molestarte. -Preguntó, con la cabeza baja.

- Te espero en mi celda a la misma hora de ayer y deja que las demás lo sepan. Ve sonriendo. - dijo Jauregui seriamente y Camila asintió, yendo para la fila.

- Oye, ¿no tuviste problemas anoche? - La fina voz de Maggie sonó preocupada cuando se detuvo detrás de ella en la fila.

- No.-  dijo Camila, viendo a Beatrice aparecer en la puerta de la cafetería. Camila vio el momento exacto  donde ella marchó  en dirección hacia la mesa de Lauren y se inclinó sobre ella, apoyando ambas manos sobre la mesa.

Aparentemente esa era la nueva atracción del lugar, porque Camila vio todos los pares de ojos enfocados  en ambas. Lauren la miró fríamente antes de decir algo que Camila no podía escuchar debido a la distancia.

Beatrice parecía molesta y Lauren dijo algo más, haciendo que Beatrice golpeara la mesa. Lauren se levantó y caminó alrededor de la mesa, quedando cara a cara con Campbell. Ella le dijo algo con su mandíbula endurecida y Beatrice resopló antes de bajar los ojos, asintiendo y acercándose a la fila, justo detrás de Maggie.

Camila vio a Lauren acercarse a ella y luego sonreír. Wow! Fue la primera vez que veía su sonrisa.

La pequeña no se atrevió a mirar a Maggie, después de todo, Beatrice estaba justo detrás de ella y no sabía de qué había hablado con Lauren.

La sorpresa de Camila llegó cuando sintió un brazo delicadamente envolverse alrededor de su cintura antes de pegar sus cuerpos. Era  Lauren.

Camila contuvo el aliento mientras miraba hacia arriba: ojos verdes fijos en los en marrones y una hermosa sonrisa jugando en sus labios.

-- ¿Nos vemos mas tarde? - La voz ronca y sexy hizo que Camila tragara y asintiera, completamente paralizada por aquellla visión.

Lauren se inclinó y dejó su boca a centímetros de la de Camila, haciendo que sus narices se tocaran y sus ojos se clavaran entre sí. La más pequeña podría haber jurado que sintió que su cuerpo temblaba y que su corazón se  disparaba en su pecho.

- Entonces te esperaré en mi celda. - dijo Lauren un poco más abajo, presionando un poco más a Camila contra su cuerpo antes de inclinarse un poco más y mover suavemente sus labios sobre los de Camila en un largo beso.

La más grande retrocedió y Camila sintió que todo su cuerpo temblaba; Aún podía sentir la llama que se encendía dentro de ella por el calor de los suaves labios de Lauren.

- Chica, ¿qué fue eso? - La pregunta de Maggie trajo de vuelta a Camila.

-- Yo no sé. - Camila dijo un poco desconcertada, volviéndose y mirando a Maggie con una expresión paralizada.

-- ¿Cómo no sabe? - preguntó Maggie confundida.

- Más o menos desde ayer nosotras ... Estamos juntas. - Dijo Camila, mirando la figura de Lauren, quien se alejó mientras miraba hacia abajo para no cruzar con la suya.

- ¿Ella te eligió? - Maggie preguntó retóricamente. - Vaya, felicidades. Eres la primera chica que ella agarro aquí. Ella siempre rechazo a todas y simplemente no pensé que fuera heterosexual debido a mi gaydar.

- ¿Ensalada? - Preguntó la mujer frente a ellos y Camila asintió.

- Espera ¿Eres como mi jefe ahora? Porque si eres la mujer de Jauregui y todo lo que Jauregui pide todos hacen, ellos también lo harán por ti. - dedujo Maggie. - Oh cielos, ¿debería llamarte señorita?

- Deberías cerrar la boca sobre ese asunto y ir a comer. - dijo Camila riendo, pero vio a Maggie asentir frenéticamente antes de hacer lo que le pidió.

A pesar de la conversación que había entablado con Maggie después de eso, lo único que su mente podía pensar era: ¿Qué quería Lauren con ella más tarde?