Una inesperada llamada causa que Aaliyah Cooper tome el primer vuelo al pequeño y fantasmal pueblo de Forks. Inmediatamente se ve rodeada de extraños misterios y antiguas leyendas que rodean las calles del pueblo, dispusta a hallar la verdad tras la...
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Aaliyah
— Parece que las cosas se van solucionando... Bella me llamó ayer, me contó que los Vulturis han aceptado su nueva vida.
Comenté sentada en una rueda vieja, cubierta por una frazada gris –Con las piernas flexionadas, y un libro de dibujos apoyado en mis piernas– mientras coloreaba una caricatura de un lobo y Caperucita que había encontrado en el garaje de Jacob.
— Si así parece — respondió ajustando una tuerca de su motocicleta con una llave inglesa. — Aunque la veo preocupada, Renesmee crece demasiado rápido...
Mordí mi labio inferior y forme una mueca, cruzando el lápiz color rojo por la capa de la niña. Era cierto que el tiempo parecía ser la única cosa que preocupaba a Bella... Y a Seth, que temblaba hasta los pies por el incierto futuro de la híbrida.
Alze la vista cuando oí unos pasos aproximarse, y en el aire floto un aroma que fácilmente reconocí. Mi corazón se altero por los nervios, al saber que era Sam.
Jake asomó la vista a la puerta del garaje cuando la vio abrirse, y de allí aparecer un cuerpo alto y robusto cubierto por una chaqueta de jeans gruesa. Sam me miró asintiendo en forma de saludó, a lo que lo respondí lentamente algo desconcertada. Luego clavo sus ojos en Jacob y el se enderezó saludandolo con la cabeza.
— He venido a hablar.
Fue lo que dijo para luego hacer las pases con Jake. Que pese a su duda – y su rencor por haberme atacado esa noche del parto– le dijo a Sam que aceptaba sus disculpas con la única condición de que los responsables fueran castigados. Hubieras querido intervenir, pues me parecía absurdo y ya los había perdonado, pero cuando oí que Sam ya había tomado las cartas sobre el asunto al igual que el consejo de ancianos, me caye. Por otro lado Jake pareció satisfecho, y le dió un corto abrazo.
Todo parecía acomodarse nuevamente, los clavos encajaban perfectamente, y la tormenta parecía calmarse. Con la reconciliación de la manada de Sam y la de Jacob, las tensiones habían reducido, y esa molestia de tristeza también.
— ¿Que pasara ahora?. — pregunté dejando el dibujo de lado. Jake suspiro alzando levemente los hombros.
— Supongo que se verá con el tiempo. Pero de algo estoy seguro, es que ya no seré parte de la manada de Sam. Ustedes si quieren...
— Me quedaré contigo. — sonreí levantándome del sillón para aproximarme a él. — y seguro que Leah y Seth también.
Jacob asintió más aliviado, y tomo mi mano.
— Lo de Sam me tenía preocupado, me alegra saber que ahora está todo resuelto. Era como una espina en el pie.
— Para mí también lo era, todo esto nos distanció. Podré visitarlos ahora — sonreí con alegría, al saber que podría ver a Emily nuevamente luego de tanto tiempo.
