Cap. 2

155K 12.5K 4.2K
                                    

Las tristezas no se hicieron para las bestias, sino para los hombres, pero si la sienten demasiado, se vuelven bestias.

Las tristezas no se hicieron para las bestias, sino para los hombres, pero si la sienten demasiado, se vuelven bestias

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Kaela

—Y bien, ¿quieres acompañarme?, Tierra llamando a Kaela —sacudo la cabeza alejando algunos recuerdos.

—¿Qué decías? —digo un poco confusa.

—Te estaba preguntando si quieres ir al río Pike, mis amigos y yo iremos a pasar el rato.

—No creo que deba ir —le dije distraídamente.

—¡Claro que sí! Tengo dos amigos superguapos y creo que te gustaran —me reí suavemente Emma es un caso perdido —. Di que sí y no seas aburrida, si no aceptas te haré cosquillas —Puso cara de cachorro abandonado. Me mordí el labio inferior, no le podía decir que no a esa cara.

—Está bien.

El profesor Hassler estaba hablando de la evolución y adaptación del organismo humano al medio ambiente. No le prestaba mucha atención porque esto es sumamente aburrido, además hoy me sentía un poco extraña como si algo fuera a suceder.

Después de tanto escuchar al profesor sonó el timbre. Emma y yo fuimos las últimas en salir, nos dirigimos a la cafetería que estaba repleta como siempre supongo.

—Ven te voy a presentar a los chicos —Prácticamente me arrastro por todo el comedor hasta llegar a una mesa donde había dos chicas idénticas; cabello negro azabache, ojos cafés oscuro, se ven que son altas y esbeltas, labios ligeramente rosados y largas pestañas. Son hermosa y será difícil diferencial cuál es cuál. Al lado de una de las gemelas hay un chico con unos tentadores labios rojos, ojos negros, alto y fuerte, nariz perfilada y su cabello rubio.

El otro chico sentando en la mesa es meno fuerte que el anterior, con un tatuaje en su brazo izquierdo, tiene el pelo de color verde, un piercing en su labio inferior que lo hace ver sexy, los ojos marrón claro y alto. Todos son altos menos yo —. Chicos ella es Kaela, Kaela ellos son: Trevor —dice señalando al rubio —él es Chad, ellas son las gemelas Briana y Daila.

Los chicos fueron muy agradables y bromistas, especialmente las gemelas, aunque todavía no sabía quién era cada una. Todos siempre han vivido en este pueblo y se conoce desde que eran niños. Hablaron de las travesuras que Briana y Dalia le hacían a sus padres y hermano mayor. Nunca me había reído tanto, una vez su hermano no quería jugar con ellas y como venganza cuando estaba durmiendo le llenaron la cama de hormigas.

La hora de almuerzo se acabó y cada uno se dirigió a su clase correspondida. A Emma y a mí nos tocaba anatomía I, que era mi clase favorita hasta ahora.

Las últimas horas pasaron bastante rápidas. Ya todos nos estábamos dirigiendo hacia el bosque donde todo estaba silencioso, salvo por el sonido de los animales y de nuestra pisada. Iba detrás con Chad que ha permanecido callado todo el camino. Me he dado cuenta de que es un poco tímido y no le gustan mucho las personas.

Eres mía© [#1]✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora