Atlas

260 39 15
                                    

Atlas caminaba erguido y orgulloso
A través de la oscuridad, la luz,
el silencio y la música. 
Una mezcla armoniosa que solo aquellos que reinaban
en el planeta parecían capaces de entenderlo.

Hasta que sus pares fueron derrotados
Por moscas molestas, semejantes a los titanes
Pero jamás iguales,
Y él fue destinado a la tortura eterna:
Siempre al borde del colapso,
Cabizbajo, dividiendo el mundo,
y el peso del cielo sobre sus hombros.

Tuvo que sostener las estrellas incandescentes
Y los mundos sin descubrir en sus brazos
Hasta quedar de rodillas y rogar piedad
Para que lo relevaran de tal suplicio.
Pero los divinos solo rieron
Y le dieron la espalda mientras se marchaban
Erguidos y orgullosos hacia sus nuevos tronos.

IcorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora