Yuanfen ☁ Ayato Kirishima

☁ Fourty-five ☁

   

Hinami los vio subir, por lo que supo qué era lo que ocurriría ahora; pensó en seguirlos, pero rápidamente denegó esa idea, así que sólo suspiró y se quedó allí.

– ¿Estás bien? –preguntó Miza.

– Ah...Sí –asintió.

– ...Es por Ayato, ¿Verdad?

– ...Sí –tragó saliva.– Él...todavía ama a Tn.

– Los vi subir recién. Ella les dirá a quién va a elegir, ¿Verdad?

– Eso creo, sí...

– No te preocupes –se sentó a su lado.– Su extraño triángulo amoroso llegará al final esta noche, así que será un alivio –sonrió levemente.

– Debería serlo, pero...tengo miedo. Estoy nerviosa.

– ¿No quieres que elija a Ayato?

– La verdad...no, pero...no puedo decir nada ante eso. Ella es quien debe decidir, yo no puedo intervenir.

– Si elije a Ayato, ¿Qué harás?

– Nada. No puedo hacer nada –la miró.– Si Ayato vuelve con ella...respetaré esa decisión –bajó la mirada.

– ¿Y si no?

– ...Deberé hablar con él. No podría salir con él de nuevo sabiendo que sigue pensando en ella.

– ...No te preocupes –puso su mano en su hombro.– No te sientas tan mal tampoco. Eres maravillosa, Hina; no puedes sentirte así por un chico.

– Sí... –sonrió.– Gracias Miza.

– Puedes hablar conmigo si lo necesitas, ¿De acuerdo?

– Sí –la miró.– Gracias –sonrió.

Miza comenzó a sobar la espalda de la castaña. Hinami suspiró, también le dolía toda la situación.

    

Los tres salieron a la terraza. La noche estaba tranquila y la brisa era leve.

– Lamento hacer esto ahora –se disculpó ella.– Sé que ya es tarde y ambos quieren descansar, pero creo que lo mejor sería acabar con esto de una vez.

– Está bien, no te preocupes –calmó el peliazul.

– Sólo dinos qué has decidido –dijo el rubio.– Ambos respetaremos tu decisión.

– Sí –asintió.

Ella bajó la mirada y comenzó a jugar con sus dedos, mientras tragaba saliva debido a los nervios. Tomó aire y soltó un largo suspiro, luego levantó la cabeza; sus ojos se posaron en Kirishima.

– Ayato...has madurado –sonrió.– Lo que pasó entre nosotros fue...malo, realmente; me dolió mucho, y no sólo físicamente, pero comprendo que eras inmaduro y estabas dejándote llevar por los ideales de Aogiri, así que...te perdono. Vivir con rencor no es algo que pueda hacer, no es bueno para mí, así que voy a perdonarte por todo lo que pasó hace años. Además, Miza me contó que de verdad me terminaste para protegerme, y te lo agradezco –hizo una pequeña pausa.– Ahora has crecido y eres más maduro, estoy seguro de que serías un buen novio; ya no eres agresivo ni impulsivo, no como antes, ahora estás más tranquilo.

Ayato sonrió levemente, se sentía mejor ahora que ella realmente lo había perdonado. Tn miró a Fukui.

– Hajime...tú eres maravilloso –sonrió.– Siempre has sido amable, cariñoso y atento. Me has dado muchos regalos y es algo tierno, aún sabiendo que siempre te decía que no gastases tanto dinero en mí –rió.– Fuiste un buen novio, casi perfecto, y estoy segura de que también serías un buen esposo y un buen padre. No tengo quejas sobre ti, más de que trabajas demasiado.

Hajime rió, era cierto aquello, era casi un workaholic. Tn suspiró.

– Ambos son muy lindos, y harían feliz a cualquiera, no sólo a mí. Pero claramente no puedo estar con ambos, debo elegir –bajó la cabeza.– Lo siento si estoy alargando mucho esto, pero...es algo difícil para mí, después de todo los quiero a los dos...pero sólo puedo amar a uno –los miró.

Ayato y Hajime tragaron saliva con nervios, estaban ansiosos ante lo que ella diría; ambos la querían, la amaban, pero este "triángulo amoroso" no podía continuar para siempre, ya era hora de ponerle un fin.

– Y yo...elegiré a... –tragó saliva.– A...

  

    

¿Con quién te quedarás al final Tn?

   

Tu dulce Hajime

o

Tu adictivo Ayato