Yuanfen ☁ Ayato Kirishima

☁ Fourty-five ☁

Tn y Touka llegaron a una sala donde se atendían a los heridos. La peliazul la miró y asintió, dándole a entender que ambos chicos que buscaba estaban allí, y luego se fue. La pelinegra tragó saliva y comenzó a caminar entre las personas, mirando hacia todos lados en búsqueda de sus "pretendientes". Se detuvo de pronto al verlos. Ayato estaba sentado, con el cabello mojado y sin su abrigo; Hajime estaba a su lado, con algunas vendas y banditas, de pie y conversando con Nishio.

– Chicos... –murmuró.

Tomó aire y corrió hacia ellos.

– Hajime...Ayato...

Ambos la miraron y le sonrieron.

– Tn –dijeron a la vez.

– Están bien...ambos... –sonrió.

Sus ojos se cristalizaron y las lágrimas comenzaron a bajar por sus mejillas, con su sonrisa aún intacta. Estaba realmente feliz de verlos bien. Rió y secó sus lágrimas.

– Lo siento –se disculpó.

Se acercó al rubio y lo abrazó con fuerza. Él correspondió.

– Es un alivio que no te hayas herido mucho.

– Estoy bien, no te preocupes –besó su cabeza.

– Menos mal.

Se alejó de él y se acercó al peliazul, mientras él se levantaba; lo abrazó con fuerza también, y este le correspondió.

– Es bueno ver que volviste bien, me preocupaba que algo te atacara o que te diera ROS.

– Las máscaras de gas sirvieron en contra del ROS, y...pude encargarme de esos bastardos abajo –rió y besó su cabeza.– No me pasó nada.

– Que bueno.

Se separó de aquel y suspiró, aliviada; ahora que estaba más tranquila, quería saber qué era lo que había ocurrido mientras ella dormía, y ahora que lo pensaba aquel calmante había sido muy efectivo, algo que le agradecería después a Kimi.

– ¿Qué ocurrió? –miró al rubio.– Haji, estás herido –miró al peliazul.– Ayato, estás... ¿Mojado?

– Ugh. El oviducto colapso y nos arrastró a mí a Kaneki con sus fluidos; tuve que meterme más adentro para sacarlo.

– ¿Dónde está él?

– En piezas. Lo llevaron a una habitación.

– ¿Piezas? –preguntó preocupada.

– Tranquila –dijo Nishio.– Está vivo aún. Kimi dijo que si lo operan estará bien.

– Ya veo...Es un alivio –suspiró. Miró al rubio.– Haji, tú...

– ¿Uh? Oh, esto –señaló el vendaje en su cabeza.– Me golpeé durante la pelea con el Búho y me sangró un poco, el resto son moretones y raspones. Estoy bien.

– Verlos bien me alivia...y me hace feliz... –sonrió.

[Noche]

Durante el resto del día se atendió a los heridos en batalla, se encargaron de los fallecidos, limpiaron los restos de monstruos y oviducto que habían quedado y demás de cosas, de esto se encargo el CCG y los servicios públicos, con ayuda de los ghouls claro. Todo había terminado ya, y sólo quedaba la reconstrucción de Tokyo.

Tn, Hinami, Ayato y Hajime seguían en el edificio del CCG a aquellas horas, cuando ya varios se regresaban a casa para poder descansar al fin, pues varios llevaban más de 48 horas sin dormir. Tn llamó a ambos chicos para hablar, por lo que se reunieron en la terraza del edificio.