My Dueño Y Señor (Libro 2 de la saga: Secretos De Luna) EDITANDO

.Cap 39.

.*:"Matteo":*.

Han pasado más de 8 horas desde que Adam convirtió a mi mamá en loba, en cualquier momento despertará y mi papá quiso estar a solas con ella para explicarle lo que habían sucedido en las últimas 48 horas.

Sé que mi papá esta sufriendo demasiado con todo lo que esta pasando, ya que nadie mejor que yo podría entender su situación, renunciar a la persona que amas es lo más doloroso que puedas experimentar. Y ahora más que nunca me siento orgulloso de ser su hijo.

—¿Cómo se encuentra mi tía Daniela? —Su dulce voz fue como musica para mis oídos, y a pesar de saber que mi tío Vlad había llegado con ella, en lo que la vi la envolvi entre mis brazos y enterré mi cara en su cuello, para sentir su olor.

—Gracias por estar aquí, bonita —susurro y siento como su cuerpo se eriza.

<<Aún se siente atraída hacia mí>> —pienso, pero inmediatamente empujo ese pensamiento al fondo de mi cerebro.

No quiero llenarme de falsas esperanza, porque el único lastimado seré yo, ya que el lazo entre mates es demasiado fuerte como para luchar contra él.

—No tienes nada que agradecer —se aclaró la garganta e intento deshacer nuestro abrazo.

Giré mi cabeza y enfoque a mi tío Vlad, mi rival, que estaba que echaba humo por las orejas de lo enojado que estaba.

'Él lo sabe todo' —me informó mi lobo.

—Ya mi mamá y mis hermanitas están fuera de peligro —les comunico. Ella suelta una bocanada de aire.

—¡Gracias, mamá! —exclama emocionada y me vuelve a abraza.

Inmediatamente le correspondo el abrazo y al separarnos nuestra caras quedaron demasiado cerca. Mi corazón comenzó a latir desbocado y sentí la necesidad de probar sus dulces labios, esos que tanto me gustaban.

Mi tío Vlad pareció leerme la mente porque gruñó tan fuerte que todos se extrañaron.

—¿Qué te ocurre, tío Vlad? —pregunta mi hermana muy confundida. —Es solo mi hermano.

—Más razón para alejarlo de MI DAMITA. —Resaltó las dos últimas palabras.

—¿Damita? Ese apodo es muy tierno —dijo Lore, con una sonrisa. —Lo voy a poner en mi novela…

—No, Lore. —La interrumpió Victoria. —Ya te dije que borraras esa novela.

—Y dejar a todas mis lectoras en el aire, ni hablar —se cruzó de brazos.

—Lore… —Victoria fue interrumpida por un estruendo.

Las puertas de la recamara, donde estaban mis padres, se abrieron abruptamente y mi madre comenzó a buscar, algo con la mirada, hasta que dio con Adam y se lanzó a sus brazos para besarlo.

Todos nos quedamos de piedra ante semejante escena.

Mamá nunca le había sido infiel a papá, ella lo amaba y eso fue lo que vimos a lo largo de nuestra vida, así que esta situación nos estaba provocando un trauma.

—Eres mío —dijo mi madre sobre los labios de Adam.

Al escuchar eso el único en reaccionar fue mi tío Vlad que entró deprisa a la habitación.

—Iván…—escuche el murmuro de mi tío Vlad y lo seguí al interior recámara, donde encontramos a mi papá recostado en la pared llorando descontroladamente.

—Iván…—volvió a pronunciar, mientras se acercaba con sigilo.

—Cosi, —mi papá observó a su mejor amigo. —la perdí, cosi, la perdí para siempre —rompió en llanto cuando los brazos de Vlad lo cubrieron.