Yes girl + Jhs + Ksj ✔️

四十二： 谁都别回家。

Capítulo 42: Nadie volverá a casa esta noche.

Me levanté aproximadamente a medio día y fue por el olor de comida. Mi estómago gruñó porque no comía nada desde horas atrás, cuando Taehyung me llevó algo de comer y ni siquiera lo había acabado. Me levanté de la cama y cogí un suéter para cubrirme un poco, pues sentía escalofríos y tal vez era porque sí me iba a enfermar. Caminé descalza hasta tomar mis pantuflas y luego bajé las escaleras.

Mi cabeza dolía un poco y estornudé. Realmente hacía frío o yo estaba enfermándome. Mientras bajaba las escaleras, noté por la ventana como pequeños copos de nieve caía, casi inapreciables. Tenía sentido el porqué hacía tanto frío apesar de la calefacción. Seguí bajando hasta llegar a la cocina donde encontré a Seokjin de espalda cocinando.

—Buenas tardes— dije e inmediatamente Daky vino a mi moviéndome la cola. Me agaché para acariciar al pastor alemán que Seokjin tenía de mascota. Ella ya se había acostumbrado a mi presencia desde que Seokjin y yo habíamos empezado a trabajar juntos allí. La perra se alzó a mi cintura rápido mientras Seokjin giraba a mirarme.

—Buenas tardes, Hye.  Siéntate, ya mismo termino de cocinar.

Asentí, dejándolo que él volviera a darse la vuelta. Bajé a Daky y me dirigí al comedor, ahí mismo. Me sacudí las manos y luego las soplé una vez que las sentí heladas. Dios, tenía mucho frío, así que me encogí de hombros.

—¿Ya te sientes mejor?— me preguntó.  Pues físicamente sí, mejor, aunque me doliera un poco la cabeza, pero sentimentalmente hablando me sentía aún hasta la mierda. Mi celular seguía apagado y no pensaba encenderlo, pero conociendo a Hoseok no tendría ningún mensaje de él hasta que su calentura se le bajara y luego me buscara. Pensaba cambiar de número porque no había excusas ni razones para volverle a escuchar o hablarle otra vez.

—Sí, solo tengo algo de dolor de cabeza, pero se me pasará. Gracias por todo lo que haces por mí, Seokjin

Le dije algo avergonzada. ¿Cuántos veces ya le había dicho gracias y también disculpas? Había perdido la cuenta.  Él no dijo nada a mi segunda oración, sino que me dijo que en una de las alacenas había medicina y que podía tomar de ella. Asentí y me levanté para abrir la alacena cuando de repente un paquete de toallas higiénicas cayeron desde lo más alto de la alacena al azulejo.

Me quedé mirando el paquete y lo tomé. ¿Por qué él tenía toallas higiénicas? Estaba lleno de polvo y la fecha de producción databa de hace más de un año atrás. Miré hacia arriba de repente encontrando otro paquete más. Se veía lleno de polvo a comparación de la parte inferior donde estaba la medicina.

—¿Encontr-— Seokjin habló, pero se detuvo  cuando me vio con el paquete en manos.  Él se acercó a mí en silencio y luego tomó el paquete para colocarlo en donde  había estado, aproximándose mucho a mí sin querer.

—No sabía que tenías novia...

Le dije, pues de seguro era de ella. No había visto alguna hermana o él hubiese mencionado a una. Seokjin aún cerca negó. —No tengo,  eran de mi hermana menor

¿Él realmente tenía una? Vaya...

—Murió hace un año en Gwacheon.

Su anunciado me dejó muda de repente, llevándose mi pregunta de curiosidad al querer saber dónde estaba. Me sentí torpe tanto que solo dije un —Lo siento...

—Descuida, Hye.

Él no se movió y luego tomó algo sobre mí, quizá la pastilla para mi dolor y luego buscó mi palma para colocarle allí. Quise saber de qué murió, pero al final no hablé. Seokjin se alejó de mi finalmente y luego me llamó para almorzar