¿QUÉ? ¿NO SOY TU TIPO?©

Adiós Jase.

Ya un poco más tranquila regreso a la casa y están todos preparando los alimentos y mi papá en la parrilla con un delantal que dice "mira mi chorizo" y una flecha hacia abajo.... Oh por Dios qué pervertido.

Cuando se dan cuenta de mi presencia actúan como si nada sucediera, y es verdad, todo está bien ellos ya tienen entendido que no hay que hablar de ese tema. Por eso los amo.

-Bueno a trabajar!- ordena mamá con una sonrisa de oreja a oreja.

Pasamos toda la mañana preparando todo, el clima estaba de maravilla, llamé a Trish para que se nos uniera pero no pudo venir ya que tenía que ir a visitar a míster eructo Jhonson o también conocido como abuelo de Trish, era algo asqueroso pero el abuelo me caía bien excepto cuando coqueteaba con la señora Norris la vecina eso era realmente asqueroso.

La barbacoa estuvo deliciosa, le hice una pequeña broma a los gemelos, les puse aji en sus deliciosas costillas asadas la verdad que me dieron pena, pero la risa pudo más conmigo y aún sabiendo que tomaron agua que era de Gordon (mi perro) ya se darán cuenta lo que han ingerido, por cierto mi perro está vacunado, mas bien dudo de los gemelos que si tengan sus vacunas al día, la verdad esta broma me salió mejor de lo esperado.

-Midi esda me das vas padar- musitó Jef con la lengua afuera.

-Claro yo te pado- me burlé, este me fulminó con la mirada.

El resto de la tarde pasó sin inconvenientes, papá había comprado un pastel de despedida para Jase, no pude evitar algunas lágrimas pero las limpie rápidamente, no quería que Jase se sintiera mal, el al fin había conseguido lo que quería, como cierre de la gran barbacoa tiré a Jase a la piscina pero los malditos gemelos se interpusieron y caímos los cuatro, caímos en la parte mas profunda y Carl no sabe nadar, así que comenzó a pedir auxilio como damicela en apuros, Jase lo sacó y lo tranquilizó.

-Hey Carl yo te enseñaré a nadar, lo prometo- dije escondiendo una sonrisa, Carl solo me miró con algo de temor, hay por Dios no soy tan mala o si?

-Niños vamos ya a cambiarse tenemos que llevar a su hermano al aeropuerto- avisó mamá con un deje de tristeza.

-Quiero el baño primero!!- grité desesperada y comencé a correr pero Jef y Carl me agarraron con la intención de tirarme a la piscina pero yo fui mas rápida y cayeron ellos, otra vez Carl pedía auxilio.

-Mixi no lo hagas, no ves que yo tengo que sacarlo- dijo Jase poniendo los ojo en blanco, acto seguido se lanzó a la piscina en rescate de la damicela en peligro....digo mi hermano.

Dos horas después estábamos en el aeropuerto esperando a que llamen para el vuelo de Jase, el viaje iba a ser muy largo ya que Princeton queda en Nueva Jersey y está en la otra punta del país, Jase se acercó a mí, me abrazó y dijo:

-Te voy a extrañar mucho muchote, te amo, eres la mejor hermanita mocosita del mundo- dicho esto solté a llorar como nunca, no quería llorar pero sus palabras fueron muy tiernas, los gemelos también nos abrazaron y nos fundimos en un amoroso abrazo. Jase se separó y sacó una cajita roja y me la entregó, acto que repitió con los gemelos, un obsequio?

-Abranlas- susurró.

Abrí la cajita y dentro había una cadenita de plata con un corazón y unas iniciales, los gemelos en cambio sacaron unos llaveritos de plata en forma de círculo con las mismas iniciales, nos miramos confundidos y nos explicó:

-Son nuestras iniciales- dijo y puso los ojos en blanco, vi nuevamente el dije del collar y era verdad estaban nuestras iniciales...J.M.J.C. Era simplemente hermoso.

-Dale la vuelta- susurró cuando me los estaba poniendo, hice lo que me dijo y tenía una pequeña inscripción Te quiero mocosita>>. Acto seguido me eché a llorar como Magdalena.