El asesino con canas

61.4K 2.8K 69
                                    

-Vamos Trish, levanta ya el culo, te vine a recoger- dije mientras me tumbaba encima de ella.

-Déjame dormir, por favor 5 minutos más- susurró escondiéndose debajo de la almohada. Esto ya era casi una fastidiosa rutina.

-¡¡Oh mira es Zac Efron!!- me levanté y corrí por toda la habitación gritando como loca, y es que, quizás sí estaba loca.

-¡¿Dónde?!- se sentó de golpe y al querer salir de la cama no se dio que tenía las sábanas enredadas en la perina y cayó de bruces al piso.

Señores y señoras, esa es mi mejor amiga.

-¡Que bruta!-me doblé en dos de la risa al ver cómo se tocaba la mejilla donde seguramente tendría un gran moratón. Me miró enfadada y setiró al piso haciéndose "la muerta".

-Vamos Trish ya levántate- traté de moverla pero no se levantaba.

Maldición, llegaré tarde.

-Trish no hagas bromas- espeté ya con exasperación.

-¡¡Trish!!

-Sino te levantas del piso voy por mi perro Gordon para que te de primeros auxilios- pero no, ella seguía sin levantarse.

-Así que quieres jugar eh- salí al baño y llené un tarro con agua. Regresé a la habitación y se lo tiré encima.

-¡Hija de tu...!- puse de todo mi esfuerzo en no reírme al ver su nada sexi cabello, parecía una nido de abispas, literalmente.

-Es que tú no te levantabas.

-Pero es que este juego no es así- contestó haciendo un puchero.

-Yo no quería jugar, vamos a llegar tarde a clases- le hice señas para que se fuera a cambiar.

-Pero siempre que hacía esto, tú me levantabas y me llevabas al baño.

-¡Eso era cuando tenías 10 ahora tienes 17 y pesas como un tractor!- exclamé.

-¡Mentira! Además tú pesas como una mole- musitó ofendida dirigiéndose al baño.

-Como tú digas ahora te apuras.

-Lo ves llegaremos tarde y nos ganaremos una detención y como hayan cerrado las puertas lavaras mi auto por un mes- maldije por lo bajo, no puedo creer que aun en el auto se seguía arreglando.

-Demonios, demonios, demonios-ya habían cerrado las puertas del instituto

-Wow, no sabía que te gustaba invocar al señor del inframundo- me miró con miedo fingido- entraremos por las puertas de gimnasio- se encogió de hombros despreocupada- la miré con los ojos entrecerrados.

Frígida.

Deja de hablarme cabeza tonta.

¿Te has fijado en lo que acabas de decir?

Shit.

Nos bajamos del auto y corrimos a las puertas del gimnasio en la parte de atrás, y para mi muy mala suerte había alguien allí, era el mismo inspector de ayer. Me detuve y Trish chocó contra mí, le hice señas para que se callara. La empujé hasta unos botes de basura que se encontraba cerca de nosotras y nos escondimos ahí, creí que esperar era la mejor opción pero no, el inspector lleno de canas seguía parado ahí, ¡parecía estatua! ¿Qué no se iba a mover?, había escuchado que siempre alguien se paraba ahí las primera hora de clases para que nadie pudiera pasar y pensé que ese rumor era mentira pero veo  que es verdad,

Hasta que por fin sí ¡yupi!

-Vamos Trish, se fue, es hora de entrar- tiré de ella hasta la puerta pero me volví a detener y chocó contra mí otra vez.

-¡Ay!, ¡me vas romper la nariz si sigues así!- se quejó.

-Cállate, no es mi culpa, mira que ahí está la entrenadora Clifford- le señalé a Trish donde estaba la entrenadora dando órdenes a los alumnos

-Pero quién carajos hizo los horarios y puso gimnasia a primera hora un miércoles- musitó enojada detrás de mí.

-Por favor puedes cerrar el pico y ver si podemos entrar-asomé mi cabeza y mal... unos cuantos estudiantes me vieron, no sabía qué clase era pero esperaba que no se lo dijeran a la entrenadora.

-¡¡Entrenadora!!- oí una voz y me era tan familiar pero no sabía de dónde.

-Si Carter- respondió la entrenadora.

-¿Puedo cerrar la puerta?- preguntó burlonamente este.

¿Lo iba a hacer a propósito?

-Claro, ¿Por qué?- pregunto con curiosidad la entrenadora.

-Nada es que quiero cerrarla, puede entrar algún animal- contestó este y como la había predicho la cerró.

Pero ¿QUÉ LE PASA? ¿Por qué la cerro? ¿Me vio? Este tampoco iba a ser mi día, que alguien me dé un tiro en este momento, voy a encontrar a ese tal Carter y lo mataré.

Ya no había nada que hacer, hoy perderé las clases, me giré en dirección al estacionamiento y oí a lo lejos que Trish me llamaba, la ignoré porque ella tenía la culpa, también la mataré, mientras iba de camino al estacionamiento hice una lista mental de todas las personas que asesinaré.

1)      Trish por quedarse dormida, principal culpable.

2)      A ese maldito inspector con canas por ser una estatua.

3)      A la entrenadora, no sé cómo entró en mi lista de próximos a asesinar pero ella también caía

4)      Y a ese tal Carter, osea ¿qué le paso? ¿Por qué cerró la puerta? ¡NI SIQUIERA LO CONOZCO!

Estoy tan furiosa que le daría un golpe a la primera persona que se me cruce.

-Oh Trish tu muerte está cerca- dije con voz cantarina y malévola.

Ella me miró con diversión pero al ver que yo no sonreía, comenzó a correr por todo el estacionamiento

-Ven acá hija de tu abuela, me la debes- grité corriendo detrás de ella.

-¡SOY TU MEJOR AMIGA!- gritó- ¡No puedes matarme, por lo menos déjame conocer al bombón de Zac Efron por favor!

-¡Engendro del demonio ven acá!- seguí corriendo detrás de ella.

Me choqué contra Trish que había dejado de correr

-Auch ahora me romperás a mí la nariz- me quejé tocándome el  lugar.

-Señoritas ¿Qué hacen fuera de clases?- preguntó alguien

Me di cuenta que era el mismo inspector, ¡¿Dios mío este hombre está en todos lados?!

Demonios, esto debe ser a causa de los espíritus chocarreros.

Agarré a Trish del brazo para que corriera pero esta no se movió ¿eh? ¿Por qué no corre?

-Trish vamos corre nos descubrieron y fue el asesino con canas ¡¡Corre mundana!!-  la sacudí de los hombros pero seguía sin moverse

-Nnno.. No puedo- balbuceó.

¿Tienes que darle justo ahora  sus nervios? ¿Enserio?

¡Dale una cachetada!

-Mierda Trish corre- gracias a Dios reaccionó y no tuve que darle un golpe pero  lamentablemente era muy tarde ¡¡oh no!! El asesino con canas nos agarró de los hombros para llevarnos a dirección.

Definitivamente este no era mi día, ni mi semana, ni mi mes.


 


¿QUÉ? ¿NO SOY TU TIPO?©Where stories live. Discover now