Abre la puerta de la cafetería, y casi al instante divisó una pelirroja cabellera que notoriamente destacaba entre las demás.
Habían pasado ya dos semanas desde la invitación a la boda de hoseok, y el pelirrojo había quedado con jeon en una cafetería no tan lejos de la estación de metro donde habían compartido una de sus más sinceras sonrisas por primera vez.
Jungkook se acercó a la mesa donde el de piel morena descansaba, y tomó asiento en frente de el.
—¿me extrañaste?– pregunto Jungkook soltando una risita, taehyung rodos los ojos divertido.
—y mucho, sentía que me desmayaría si no llegabas.— dijo mientras guardaba su teléfono celular en el bolsillo derecho del pantalón.
—hubiera sido divertido ver eso.
—tonto.
La mirada del pelirrojo chocó con la de su acompañante, por unos segundos se quedaron así, en silencio, mirándose. Y luego sonrieron.
☆★
Al salir de la cafetería y agradecer a la amable señorita que los había atendido, eran aproximadamente las tres de la tarde. El clima estaba agradable, algo nublado pero aún el sol brillaba a través de los blancos algodones que adornaban el cielo.
Entonces, no sabe porque pero se le pasó por la mente las cosas que le gustaría hacer con Jungkook, cómo está, tomar su mano y caminar sin rumbo fijo, pero luego recuerda que ya lo habían hecho y sonríe, eso no era nada nuevo. Besar, quería besar a un chico, quería besar a jungkook otra vez.
—jungkook...— habla de repente taehyung, recibiendo un "uh" como respuesta por parte del azabache.—¿te gusto, verdad?— pregunta el pelirrojo mirando los orbes color café de su acompañante, este sonrió enternecido.
—¿tu que crees?— taehyung desvío la mirada sonrojándose de repente.
—que sí.
Jungkook iba a decir algo , pero para ese entonces los labios de taehyung ya estaban sobre los suyos.
Ese chico lo traía loco.
