K I R A | Crepusculo

→Three

—Acepto ese trato solecito — el señor Jones sonrió con malicia — Aunque sería mejor si le pones un poquito de...

—No — se negó Kira — no le pondré al jugo alcohol

— ¡Oh vamos niña! — Animo el anciano — Solo unas cuantas gotas

—Es jugo de naranja o nada — dijo Kira severamente — Usted decide

El anciano suspiro derrotado— Eres imposible de corromper Solecito

—Quiero mantener este trabajo señor Jones — se excusó la rubia — ¿Quién le va a traficar dulces y jugos de naranja si me voy?

—Muy buen punto niña — Señalo el anciano — Ahora ve por ese jugo solecito no me hago más joven aquí

Solecito. Un apodo puesto por los pacientes con quienes trataba, cuando había preguntado por qué le decían así el señor Jones le había respondido: Eres un rayo de sol en este estúpido hospital del demonio

Kira iba caminando con una pequeña botella de jugo natural de naranja, Kira ya se había acostumbrado a los trucos de percusión del señor Jones por lo cual siempre que salía de casa traía consigo una botella de jugo con poca azúcar

—Aquí está el jugo Señor Jones — Kira elevo la botella mostrándosela — Ahora no hay pretextos de que no se tome las pastillas

—¡Ah...Kira! — Exclamo con júbilo el anciano — si todavía fuera joven te invitaría a salir

Kira sonrió — Y yo cordialmente lo mandaría a freír espárragos

El anciano soltó una carcajada —¡Por eso eres mi enfermera favorita Solecito!

Después de checar que el señor Jones se tomara sus pastillas correspondientes Kira camino hacia la resección para ver que otro paciente le tocaba su medicina. Eso hacia ella checaba a los pacientes en recuperación y se encargaba de administrar su medicina o de desinfectar las heridas de los recién operados

—¡Kira! — Llamo un enfermero, Kira camino con rapidez hacia el tal vez era un paciente del doctor Cullen que necesitaba su ayuda — ¡Buscan al doctor Cullen!

— ¿Quién? — Pregunto la rubia con curiosidad — ¿Dónde está?

— Esta justo ahí — El enfermero señalo a un rubia hermosa de ojos dorados — Si me consigues su número te invito a comer

—En tus sueños Ethan...— murmuro antes de dirigirse hacia la rubia

—Hola soy Kira Argent — se presentó — Soy la aprendiz del doctor Cullen me dijeron que lo buscabas ¿Necesitas algo?

Rosalie la miro con curiosidad por la amabilidad con la que se había presentado y por qué no veía en ella una pizca de miedo como muchos en esa sala. Sus instintos les decían que no debían acercarse los instintos de la chica rubia frente a ella parecían no funcionar.

Pero lo cierto era que en el mundo animal, los cazadores de diferentes especies se trataban con respeto como si ellos mismos admitieran que estaban frente a un contrincante de la misma fuerza y poder.

Rosalie no estaba frente a una presa. Estaba frente a frente con un cazador con la misma o más fuerza que ella

—Estoy buscando a mi padre — Dijo Rosalie sin ninguna intención de tratarla mal, por alguna razón a la vampira le parecía abominable tratar mal a un ser que desprendía la más puras de la alegrías — Necesito hablar con el

—El doctor Cullen está en una cirugía de emergencia — informo la rubia de ojos verdes — ¿Te gustaría esperarlo en su consultorio?

—Si eso sería perfecto — así evitaría el olor a sangre — te sigo