La profecía

Capítulo 15

Todos llegaron a la oficina del director y para cuándo llegaron la profesora Brithjet estaba allí. Albus estaba con sus brazos cruzados como si supiera de antemano a lo que venían.

Cuando Hermione vió a la profesora se sintió incómoda.

- Bueno supongo que al haber mucha gente en mi oficina es muy grande lo acontecido.
¿Quién desea comenzar?

Hermione dió un paso al frente.
- Profesor yo no tengo que ver nada en todo lo que haya acontecido. Yo estaba leyendo en el lago. Estoy aquí por... Bueno en realidad no sé qué hago aquí.

- Entiendo Señorita Granger, es libre de marcharse si lo desea.
- ¡Gracias señor!
- Tú te quedas - le ordenó Ginny tomándola del brazo.
- La señorita Granger ha manifestado querer retirarse Weasley- habló Severus- déjela marchar, ella no tiene nada que ver en todo esto.
- Sí claro, porque le conviene. Hermione quédate por favor - dijo Ginny.
Hermione se quedó por complacer a su amiga pero no tenía idea de que pasaba.

Severus maldijo su mala suerte.

La castaña se separó un poco del grupo y se pegó de una pared.

- Minerva, puedes explicar que sucede.
- Solo sé que había un alboroto cerca del lago y cuando fui a  poner orden me encontré la escena. Severus y la señorita Weasley discutían, él deseaba castigarla y ella se oponía al castigo. La señorita Weasley alega que Severus desea castigarla injustamente.

- Y así es- interrumpió la peliroja.
- Díganos su versión Señorita Weasley.

- Claro profesor, el profesor Snape solo quiere castigarme porque...

Snape le rogaba con los ojos que no lo dijera. Pero la peliroja ya estaba cansada del sufrimiento de su amiga por ese bastardo.

- Porque lo encontré en una situación indecorosa con la profesora Brithjet.
Entonces salí corriendo y me persiguió, él no quería que le dijera a ...

Cuando Hermione escuchó eso miró a la profesora y luego agachó la cabeza para mirarse a ella misma, estaba comparándose con ella, quizás menospreciandose y Severus lo sabía, la estaba mirando inadvertidamente.

-Albus todo tiene un explicación.
- Es mejor que la tengas, es la segunda vez que vienes aquí por lo mismo.

Minerva no podía hacer comentarios seguía petrificada después de la declaración de Ginny.

- ¿Y usted profesora, tiene algo que añadir?
-Pues lo que dice la señorita Weasley es cierto, aunque no sé ¿cuál es el escándalo? somos dos adultos pasando un buen rato en un lugar privado.
- Y con la puerta abierta, como para exhibirse ¿No?- espetó Ginny.
Albus miró a la profesora atraves de sus gafas de media luna, listo para estudiar su respuesta.

Hermione fue deslizándose en la pared hasta quedar sentada en el suelo.
Severus ya estaba molesto con la situación, estaban lastimando a la chica.

- La Profesora y yo no estábamos haciendo nada.

- Sí claro, por eso ella estaba en horcadas sobre usted y sin nada puesto en la parte superior.
Snape miró a Hermione su vista parecía perdida hasta que ella lo miró.
- Puedo jurar que no la toqué en ningún momento- dijo sin dejar de mirar a la chica.- Puedes ver mis recuerdos, acepto el Veritaserum si es necesario pero juro que las cosas no son como se pintan.- está vez lo dijo como si estuviera hablando directo a ella.
Las lágrimas de la chica comenzaron a caer y Snape sentía desmayar.

- ¿Es cierto eso Profesora?
- Pues sí, él no quería por lo menos no ahora, no hoy pero sí en un futuro pero yo me precipité y fui yo quién lo puso en esa situación.