Antes de tí.

42. Pesadillas

Una semana más tarde
(Narra Natalia)
*ya había transcurrido una semana, y me encontraba mucho mejor. Habían venido todos nuestros amigos, y mis padres con mis hermanos. Les había presentado a Alba como mi novia, y se lo habían tomado muy bien, aún que ya sabía que les iba a caer genial. Como Albi es así de mona, se queda todas las noches a dormir conmigo, me ayuda a ducharme, a ir al baño, etc.... La quiero tanto. Las heridas me siguen doliendo, pero menos. Se me están curando bien, y me han dicho que no me quedarán cicatrices, cos que me tranquiliza mucho, la verdad. La recuperación ya bien, ya me han quitado las vías, voy cogiendo fuerzas y puedo comer yo sola. Lo que más me duele son las costillas, pero bueno, cada cosa a su tiempo.*
(Narra Alba)
Había conocido a los padres de Nat y son encantadores la verdad. Me he llevado genial con su hermana pequeña, Elena, es adorable. Veo que Nat va mejorando, cosa que me alegra mucho, nos han dicho que se está recuperando muy bien. Estoy durmiendo todas las noches con ella, me niego a dejarla sola. Ahora estamos en el hospital, en su habitación, ya es de noche y nos vamos ya a dormir. La he acompañado a ducharse y a cambiarse. Ya la he ayudado a ponerse el pijama, y me lo voy a poner yo ahora. Me cambio en el baño por si de repente entra alguna enfermera a la habitación. Me aseo rápido, y me siento en el sillón a su lado. Está observando tumbada en su cama*
-te gusta lo que ves?
Natalia: si, mucho
*yo le sonrió. Es tan tierna*
Natalia: ven aquí bebé
*abre los brazos en señal de que me acerque, y yo lo hago con cuidado y la abrazo, dándole suaves besos en el cuello*
Natalia: gracias por quedarte estos días conmigo Albi, significa mucho para mi que me cuides así
-gracias a ti por dejarme cuidarte Nat
Natalia: ayy te quiero tanto
-y yo a ti tonti
*seguimos abrazadas un poco más, hasta que me separo, me siento en el sillón y le doy la mano*
-buenas noches amor
Natalia: buenas noches Albi
*me acerco a ella y le doy un beso en los labios. Me acomodo en el sillón, me quedo pensando un rato, y al girarme a ver cómo estaba veo que está dormida. Con los labios entreabiertos, y con nuestras manos entrelazadas. Tiene una media sonrisa dibujada que no puede ser más adorable. Me quedo mirándola un poco más, y al final me duermo.*
*Cuatro y media de la mañana
*de repente veo que Natalia empiezo a respirar con dificultad y a agarrarme muy fuerte la mano. Una pesadilla*
Natalia: Alba....
-mi amor estoy aquí no pasa nada...
*empiezo a acariciarle suavemente la cara para que se despierte, está empezando a tener sudores fríos*
-Nat ya está, estoy contigo... Despierta bebé....
*de repente abre los ojos de golpe y se reincorpora en la cama. Me mira y se pone a llorar. Joder. La abrazo para que sepa que está conmigo y a salvo*
-ya está mi vida, ha sido una pesadilla, estás a salvo conmigo
*ella sollozaba en mi cuello y me abrazaba fuerte, como si quisiera retenerme*
-no pienses en ello Nat, ya está...
*asiente levemente con la cabeza y tras estar un buen rato en silencio abrazándonos y yo dándole besos en la cabeza, me separo y le miro a los ojos*
-vamos a volver a dormir, vale? Si ves que no puedes me avisas, yo no dormiré hasta que te duermas tú
Natalia: d-duerme conmigo en la cama por favor...
*le salió un hilo de voz*
-no quiero hacerte daño Nat...
Natalia: no me haces... por favor
-vale *sonrío, me hace hueco en la cama, que es bastante grande, y me tumbo a su lado. Pone su cabeza sobre mi pecho, como hacíamos siempre, y yo mi mano sobre su espalda*
Natalia: echaba de menos tenerte tan cerca
-y yo
*le di un beso en la cabeza*
-venga, a dormir bebé
*se acurrucó un poco más contra mi y empecé a sentir sus respiraciones cada vez más pesadas y lentas. Se acabó durmiendo plácidamente*