Antes de tí.

41. "Te amo Nat"

(Narra Alba)
*decido entrar, sabiendo que me voy a derrumbar en cualquier momento. La veo allí, tumbada en la camilla y más pálida que nunca. Tiene una vías puestas en el brazo, conectadas a un suero. Le han quitado la máscara de oxígeno, eso me tranquiliza un poco. Me acerco despacio, y veo todas las heridas y las brechas que tiene en la cara. Me derrumbo, todo por mi culpa. Me siento a su lado, le cojo de la mano y se la acaricio suavemente*
-Nat... *le susurró*
Sé que no me oyes, o a lo mejor si, pero sólo quería decirte que muchas gracias por todo... Siento muchísimo que te haya pasado esto, de verdad, me parte el alma verte así, tendría que haber sido yo... Pero eres una mujer valiente y fuerte, muy fuerte, y sé que vas a salir de esta... *se me resbalaban algunas lágrimas* Te amo Natalia, muchísimo, y estoy deseando que te despiertes y decírtelo... Y que sepas que no me pienso despegar de tu lado, pase lo que pase, no me moverán...
*me acerco cautelosamente a su frente y le doy un suave beso, con cuidado de no hacerle daño. Me quedé unos minutos contemplándola, llorando en silencio, y acariciándole el dorso de la mano con el pulgar. Me sentía tan mal... Oí que alguien llamaba a la puerta, era Maria.*
-pasa
María: que tal está?
-bueno, aquí la ves... pero es muy fuerte y sé que va a salir adelante...
María: claro que si Albi. Y tú, como estás?
-bueno, bien. Me ha impresionado verla así, pero me pienso quedar a su lado pase lo que pase
María: cuando se despierte y te vea se va a alegrar tanto...
-ojalá....
*seguimos hablando un rato, y yo no me despegaba de su lado. Vino una enfermera a cambiarle el suero, y María fue a buscarme ropa a casa para pasar aquí la noche. Cuando me la trajo vino también Pablo, me dio ánimos, y se fueron los dos, dejándome con ella. De vez en cuando le hablaba, le decía cosas bonitas y le cantaba. A veces podía notar cómo sonreía levemente, y eso me incitaba a seguir. Eran ya las 22 y decidí irme a dormir en el sillón que estaba a su lado. Las enfermeras ya me había dicho que si necesitaba algo que las llamara, que estaban por los pasillos. Mañana vendrían los padres de Nat a verla, no les conocía, me había hablado de ellos, pero nada más. Mañana iba a conocerlos, cosa que me ponía un poco nerviosa. Me senté en el incómodo sillón no sin antes darle un beso a Nat, y me dormí.*
(Narra Natalia)
*todo negro. Lo veo todo negro, y no oigo nada. Me duele todo el cuerpo, no sé dónde estoy. No puedo moverme, estoy atrapada en un vacío interior del que no consigo salir. Que cojones pasa? De repente oigo una voz que conozco demasiado bien. Alba. No consigo distinguir lo que me dice, no entiendo nada. Sólo oigo sonidos, pero sé que es ella, la reconocería entre mil más. Dónde estoy? Está bien? Siento que me coge de la mano y que me la empieza a acariciar, y también creo oír que llora. Me gustaría decirle que estoy bien, que no llore, pero no puedo, joder... No sé cuánto tiempo pasa, pero de repente siento como que vuelvo a la vida. Me sobresalto en el sitio, y consigo abrir los ojos despacio. Miro a mi alrededor, todo negro. Joder me duele todo el cuerpo, no sé qué ha pasado. Está Alba? No la veo.*
-A-alba?
(Narra Alba)
*estaba durmiendo, y de repente una voz me saca de mi sueño. Al ver que es ella no puedo contener la emoción y me pongo a llorar*
-Nat...
Natalia: dónde estoy Alba? Qué pasa?
-Nat estamos en el hospital, fuiste secuestrada por unos de la banda de Alejandro y Gabriel... Te han dado varias palizas Nat... Te encontramos des-desnuda llena de herid-das y yo pen-pensaba que te perdí-día... *empezaron a brotar las lágrimas por mi rostro*
(Narra Natalia)
*cuando me lo contó empecé a acordarme de las cosas, Alba lo ha tenido que pasar tan mal...*
-Mi amor lo importante es que ya estoy bien... No llores por favor...
*acerqué mi mano torpemente a su mejilla y se la empecé a acariciar*
Alba: ha sido todo por mi culpa Nat...
-no digas eso por que no es verdad Albi. Dame un abrazo por favor
*abrí los brazos con cuidado y me dio un abrazo intentando no hacerme daño. La quiero tanto, que no soporto que se eche la culpa, de verdad*
Alba: te quiero muchísimo Nat, eres muy valiente
-y yo a ti, mi vida