Capítulo 11: Fénix

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Rainie

Doce horas de recorrido. Mike podría creer que huí de Spring para no volver. El auto verde esperaba por mí cuando llegué al letrero de entrada a las doce de la noche y el recorrido no paró en toda la noche, no descansamos ni un minuto y mis ojos no se cerraban, el insomnio por la ansiedad fue un aliado inesperado.

Llegamos a un estacionamiento abierto donde un auto azul nos espera. Karrie sale de él contorneando sus caderas, lo entiendo como mi señal para bajar también y lo hago. Primavera iniciando y el calor se siente varios grados sobre lo que llamaríamos primavera en Spring.

-¿Dónde estamos?-

Un hombre joven baja del auto verde y se acerca a nosotras con las manos en los bolsillos. 

-¿No sabes leer letreros?- bromea Karrie. El sujeto hace un ademán de reír.

La irritanción de haber conducido toda la noche sin comer ni beber nada, sin siquiera detenernos a orinar tiene mi mal humor a flor de piel -¿Puedes explicarme que mierda estamos haciendo en Oklahoma?-

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La fachada de la casa le da un aire acogedor, dos niños pequeños corretean en el jardín. Desde nuestro lado de la acera puedo ver a través de los grandes ventanales de lo que parece ser el comedor. El sujeto del auto verde se quita las manos de los bolsillos y mira su reloj.

-Ya es hora- dice. 

-¿Y tú quien demonios eres?- me atrevo a preguntar y mi voz suena aún más brusca de lo que esperaba.

Karrie responde por él -Es mi compañero de trabajo- dice

El sujeto estira su mano hacia mí, sonriente. Es como un niño en el cuerpo de un adulto, con sus grandes brazos y su ancha espada acompañada de una sonrisita inocente. -Oliver-

No me molesto en devolver el apretón, miro hacia el frente otra vez. Ahí, en la puerta de la casa está una mujer llamando a los niños al comedor. Sus mechones cobrizos están atados en alto entregando una mejor imagen de su nariz respingada y sus pómulos levantados. Aún con el cambio de color del cabello, con esa nueva ropa de madre de suburbios, con los años, sigue siendo inconfundible. Siento nauseas.

-Allison- mi voz tirita en mis labios al salir. 

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Este es un mini capítulo casi demasiado pequeñito, pero ya se vienen más, ¿aún hay personas que siguen esta historia?
besos.
<3

SEÑORITA PERFECTA [EN PROCESO]Where stories live. Discover now