Familia /au de gravity falls ilvermorny

Abierto

Era su quinto año y él estaba agotado, su tiempo se pasaba entre clases y entrenamiento con Tobi y Boaz, el nombre que el mismo le puso a su ahora corcel, ahora casi nunca iba a la biblioteca o visitaba otro lugar de la escuela más que el bosque que era el lugar que tenia permitido volar con Boaz.

Hoy sin embargo era sábado y no tenía ni clases ni entrenamiento, su plan era dormir tanto como le fuera posible, sin embargo su compañero no tenía los mismos planes, Dipper sintió como su cuerpo caía y golpeaba contra el suelo su cabeza apuntando debajo de su cama, esta tan consternado que no pudo detectar las risas de su compañero y el como el salia riendo de la habitación dejándolo solo y tirado, sin embargo cuando volvió en si sus ojos se agrandaron, vio debajo de su cama una luz tenue, estiro su brazo hacia la dirección y lo que sintió fue una tapa gruesa, los recuerdos volvieron a su mente y Dipper apurado saco el antiguo libro.

La mano de seis dedos brillaba y Dipper solo se atrevía a observar con miedo tomo la tapa superior y esta increíblemente se abrió, como un libro cualquiera, esto solo inquieto mas al castaño, ¿es que se había vuelto loco? el recordaba todo mas exagerado, con el libro atrapándolo entre sus paginas pero sin poder leer algo, sin embargo esta vez el libro solo se abrió con una facilidad espeluznante.

Dipper se sentó  en su cama, piernas cruzada y el libro entre ellas, empezó a pasar pagina, entre las primeras una lupa entre las hojas y varias partes tachadas u arrancadas, su curiosidad estaba al limite, y fue así que Dipper comenzó a leer lo que parecía ser una bitácora de un mago que, al parecer había tenido mucho contacto con criaturas mágicas.

Con cada pagina leída su curiosidad aumentaba, había seres que estaban documentados en este libro de las cuales nunca había escuchado antes, se preguntaba si solo eran disparates o algo más, se dio cuenta de algunos números repartidos por las paginas sin un orden especifico o palabras sin sentido, pronto se dio cuenta de que aquello probablemente era una especie de código o lenguaje que el no conocía, debía investigar al respecto se prometió en silencio.

Se encontró leyendo en voz alta y vio con asombro como las letras se desprendían del libro para flotar alrededor de él, era increíble, hermoso y familiar. 

La hora parecía no importarle y no tenía hambre, su cuerpo y mente llenos de éxtasis al encontrarse  leyendo al fin el libro que había guardado y escondido desde hace años.

Pero el no tenia idea, quizás de haber sabido ahora hubiese devuelto el libro a la estantería olvidada de la biblioteca, o lo hubiese enterrado 10 metros bajo tierra, todo para evitar el encuentro con cierta persona, que él todavía no conocía pero sería un dolor permanente en su trasero. Su destino estaría sellado en apenas unas semanas después de todo, mientras tanto tranquilo podía disfrutar de su rutina.