Planetarium

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Park Jimin

Durante un largo tiempo, el mundo se caracterizó ampliamente por su mayor creencia la cual se forjaba en los complementos. Se creía, en aquellos remotos pasados en remotos lugares, que uno era destinado para alguien más desde antes del nacimiento. Y toda esa idea se forzaba o se respaldaba gracias a los elementos otorgados por el cielo, el espacio y el universo.

El cielo era mil veces más limpio e impactante. Las estrellas iluminaban fuertemente y ninguna parte de la bóveda celestial era capaz de librarse de ellas en la oscuridad. Por ser tan abundantes, en las antiguas civilizaciones, se especulaba que guardaban relación con la existencia humana. Es decir, a cada persona le correspondía una estrella y cada una de ellas se unía con otra por medio de una esencia invisible a la cual llamaron arké.

Las culturas tenían esa creencia muy marcada en su ideología, lo cual ponía como consecuencia realizar sus acciones de acuerdo a lo que se especulaba. Parecían vivir siempre con el propósito de encontrar su complemento, por lo que toda acción, todo descubrimiento y toda ciencia habían iniciado con esa finalidad. La astronomía, que fue de las primeras ciencias en desarrollarse y la más importante, se fundó para descubrir con exactitud la estrella que le correspondía a cada persona y a cuál otra se encontraba unida. Sin embargo, al paso del tiempo, ese motivo fracasó porque, de repente, se empezó a creer que las personas podían ser capaces de alcanzar, por medio del razonamiento único del humano, lo que le era propio, seguro y entendible sólo a los dioses.

La gente era tan consciente y fiel creyente a los complementos que, inclusive, al realizar arte, tenían la esperanza los artistas, quienes eran más idealistas y enamoradizos, de que por medio de sus obras llegarían a encontrar a la persona que les pertenecía. Se frecuentaba, además, dentro del área de la salud mental (la cual fue hasta varios años después cuando se pudo desarrollas estrictamente como una ciencia) que, cuando la gente padecía de una extraña y durable tristeza profunda, o de esa amarga sensación de vacío inexplicable, era porque su otra estrella, su verdadero complemento, su verdadera persona destinada, había muerto.

Las formas de interpretar el vasto mundo fueron cambiando y, por ende, varias ramas del conocimiento que en su momento se creían elementales, desaparecieron y se les consideraron como las ciencias míticas de la civilización antigua. La creencia de los complementos fue perdiendo importancia así como todo aquello a lo que antes se le había puesto mayor relevancia: lo ético, lo abstracto, lo artístico, lo espiritual y lo mental. Debido a ello, las personas, obviamente, también fueron cambiando y el nuevo interés se enfocaba en generar beneficios económicos y materiales, lo cual no estaba mal, pero casi se llevaba a un extremo peligroso.

La astronomía de la época antigua se hizo a un lado, la filosofía y las artes fueron víctimas del prejuicio. La labor de un artista fue perdiendo importancia y era muy difícil que alguien comprendiera sus obras con exactitud debido a la falta de enseñanza sobre ello en las instituciones. La filosofía sufrió no solo de los prejuicios externos, sino también internos, de esas personas quienes a pesar de dedicarse a ella, no la emprendían bien.

Las nuevas ciencias dedicadas al comportamiento y al bienestar mental fueron vistas de manera despectiva. Tanto era el desprecio a la psicología y a la psiquiatría, que la gente, cuando en verdad necesitaba de esa ayuda, no acudía a los servicios por miedo a lo que pensarían los demás o por la prohibición de sus propios familiares.

La gente fue perdiendo identidad cultural. Se fueron evitando las arduas reflexiones para comprender mejor las cosas. Los niños comenzaron a crecer en un mundo muy carente de valores y ellos mostraban demasiado la ausencia del respeto. Quienes gobernaban a los pueblos, mantenían y ocultaban los conflictos porque eran tan conscientes de que la ignorancia desarrollaba la despreocupación como para mantener al pueblo en la felicidad y así evitar que se revelara en contra de ellos.

La caída de ícaro (BTS)Where stories live. Discover now