❝BERMUDA TRIANGLE❞ »bts; jimin + jungkook

LEVEL─01.

Temblando, sus manos por fin lograron insertar las llaves en la reja que separaba la puerta de entrada al pequeño stand de la cafetería. Giró su muñeca con suavidad, con un pensamiento sinsentido sobre la llave rompiéndose en el peor de los casos. 

Al adentrarse al lugar, se permitió observar lo poco y nada que había, siendo completamente lo necesario: mini-refrigerador, congelador, lavaplatos, diferentes utensilios de cocina, un estante repleto de vasos de diferentes tamaños y colores, cafeteras y gabinetes donde guardar los ingredientes. Con reticencia, dejó su bolso en la entrada, mientras sus pasos la guiaban aún más al interior.

Aquel puesto no tenía mucha novedad. Era un viejo stand de bebidas y bocadillos, que aunque había sido famoso en su tiempo, había cerrado gracias al dueño, que acabó dedicándose al arte en lienzo y no el que se categorizaba en un vaso plástico por sabores. Resultaba ser el único lugar, además de la limpieza, en la que ella podría rendir trabajo cerca de sus clases en la mañana, y armada con una nula experiencia decidió lanzarse en espera de lo mejor. 

Las ganancias aumentaban según qué se vendía, y bastaba, según ella, con buscar algunas recetas de jugos naturales en internet y conseguir varios litros de gaseosa, por si las moscas. 

Con curiosidad se acercó a la parte trasera del stand, cubierta al público por una simple puertaventana forrada con papel ahumado. La misma, escondía nada menos que un estante (vacío), un armario pequeño junto a un escritorio y silla, y otro refrigerador gigante. Contaba con un aire acondicionado colocado en la parte alta de la pared situada a su derecha, pero se hallaba apagado por lo que sabía un buen tiempo.

Volvió tras sus pasos, observando de manera más minuciosa cada lugar e incluso pasando los dedos de su mano izquierda conforme avanzaba a pasos lentos, simulando suaves caricias a la inmobiliaria con la intención de medir el grado de suciedad. Llegó hasta el pequeño refrigerador, y se agachó ligeramente hasta alcanzar la manecilla, halándola hasta abrirla. Descubrió que estaba desconectada y, por lo tanto, sin la refrigeración interior; aún así no se preocupó porque aunque en la materia sus ojos eran ciegos, a su parecer no había nada de malo con el electrodoméstico. 

Su intención principal además de hallar su lugar de trabajo matutino, era limpiar un poco, pero no encontraba los utensilios para el trabajo y por lo que se veía, no lo necesitaba demasiado, haciéndola suponer que aquel lugar o no había estado solo por mucho tiempo, o los conserjes se habían encargado de ello también.

— Creo que no será necesario limpiar, entonces... —murmuró para sí misma, ajustando en su hombro la cinta de su pequeño bolso de cuerina. Un escalofrío leve la recorrió, dándose cuenta de lo, incluso tenebrosamente, silencioso que era el lugar—. Quizás debería conseguir un radio o unos altavoces para mi teléfono, también...

Finalmente, salió del lugar, haciendo una lista mental de sus prioridades mientras giraba el cerrojo nuevamente, esta vez con muchísima más convicción que al inicio.

  « Lista de cosas que tengo que hacer para sobrevivir en Seúl por, al menos, el primer trimestre:

- Conseguir trabajos de medio tiempo con paga suficiente para mantener el piso alquilado y comida en la mesa.

- Equilibrar mi tiempo entre los estudios, el trabajo y mi salud.

- No ser vaga.

- Conseguir uno o dos compañeros de trabajo para el stand de la universidad (sin método, aún)

- No fracasar.  »    

Un suspiro se escapó de mis labios pálidos y agrietados por el frío invernal. Estábamos a finales de enero, y no fue sino hasta que estaba en labor de mudanza que me di cuenta que ir desde Ilsan hasta Seúl en diciembre no era sino una de mis peores decisiones. Aún así, debía llegar a la capital y establecerme con bases de hierro para poder salir adelante, aún si lo único que quisiera es encerrarme en mi habitación y hacerme bolita sobre la calefacción. Durante todo el día.