- Uno. - dice levantando su dedito. - Dos.. - levanta el otro- Tres...,cuatro...,cinco., Seis..., - tiene seis deditos levantados pero queda callado.

- Sie... - intento ayudarlo.

- Mami. Yo sé, no me digas. - me mira molesto.

Tan parecido a su padre.

- Perdón mi amor.

- El otro es... Ah si... Siente, ocho, neve, diez. ¡Viste mami ya se!

- Felicidades mi amor. Aunque es nueve.

Llegamos al parque, salgo del auto le abro a Erick y lo tomo de la mano. Caminamos hacia la heladería, Erick se me suelta y corro hacia el cuando escucho un cuidado y siento como me jalan y me toman de la cintura, la bicicleta pasa y yo no puedo apartar mis ojos a esos ojos que me robaron la razón.

- Lali...

- Peter....

No puedo apartar la vista de sus ojos. Está mas guapo que antes, los años no le han pasado, más bien está mas bueno que nunca.

- Mami, ¿estas bien, quien es? - Peter baja la mirada y al ver a Erick abre los ojos.

- Si hijo, estoy bien.... - miro a Peter esperando que reaccione.

- Lali.... ¿Que es esto?

- Peter acá no. Tengo que comprarle un helado a mi hijo si... Quiere ven con nosotros.

Callado nos dirigimos a la heladería. Le compro el helado a Erick y dos para Peter y para mí. Nos vamos al parque, Peter y yo nos sentamos y vemos a Erick jugar en el sube y baja con otro niño. No puedo apartar la vista de mi hijo y sé que Peter espera que le de una explicación, pero no sé que decir.

- Es...

- Sí.

- ¿Por qué no me dijiste?

- Después de salir como salí de tu casa. Volví al mundo que me sacaste, fui tan idiota que me drogaba en mi estado y me puse mal y casi lo pierdo. Una doctora me hizo entender que necesitaba ayuda y me llevó a un centro de rehabilitación, estuve en ese lugar hasta curarme.

- cambiaste tanto.

- Sí, cambié. Mi abuela me dejó su fortuna y salí adelante ahora soy alguien éxitos y no dejo que nadie me quiera pisotear.

- ¿Porqué no me buscaste? Tenía derecho de saber que seria padre.

- ¿Cómo buscarte? Me dijiste de todo, yo quise explicarte lo de Agustín. Vos no me dejaste, además, volví ese día. ¿Sabes lo que encontré? A ti y Alexandra haciendo el amor. Tan rápido pasé de ti. - me limpio rápidamente las lágrimas que comienza a caer.

- Lali.. Yo cometí el error yo no sabía que vos. Estaba dolido, ¡que querías que hiciera! La mujer a la que amo me había engañado con mi mejor amigo.

- ¡No lo hice porque quería! El me obligó.

- Ahora lo sé, no sabes cuanto me odio.

- Ya no importa. Además vos ya tienes a tu familia.

- ¿De que hablas?

- Vos y Alexa. Tienen un hijo. Los vi. Fui a buscarte para contarte todo, pero los vi desde mi auto lo felices que eran.

- El auto... ahora entiendo. Lali, Alexa y yo no estamos juntos. Mierda, no tengo un hijo de ella. Alexa está casada y el bebé que tiene es de su marido. Ella solo es una amiga.

- ¿Qué? No lo puedo creer.....

- Sí, carajo. Estuvimos separados porque no nos animamos a buscarnos.

ADICTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora