Increíble como puedo desahogarme e un folio de fondo blanco.
Con un destinatario, pero con la peculiaridad de que nunca será enviado.
Increíble como mi mano comienza a escribir todo lo que mi cerebro le va dictando.
Tiro folio tras folio,
hoja tras hoja,
las rompo o las hago una bola solo por no encontrar la palabra exacta.
Cuántas cartas estarán ahora mismo volando por el aire,
con mi nombre en el remitente y sin ningún destino.
Solamente viajando como si fuese un torbellino.
Pero nunca dejaré de escribir cartas.
Nunca dejaré de cerrar sobres, porque eso sería cerrar mi corazón al horizonte.
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LOS FRAGMENTOS DE NATALIA.
Short StoryAmor, desamor. Vida, muerte. Oportunidades, desplantes. Reflexiones íntimas, reflexiones universales. ¿Por qué no te das la oportunidad y lees estos fragmentos? No dudes en descubrirlo.
