Te esperaba como quien espera a alguien que hace tiempo que no ve.
Pero esto era más grande.
Más intenso.
Pero tu llegada fue una ilusión en balde.
No negaré que me moría de ganas por conocerte.
Aún no has querido llegar, por lo que no puedo obligarte.
Las puertas seguirán abiertas esperando tu llegada.
Da igual que me avises en la madrugada.
Prefiero pasar una noche en vela,
con tal de ver tu cara,
que dormir tranquila
pero a la vez desilusionada.
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LOS FRAGMENTOS DE NATALIA.
Short StoryAmor, desamor. Vida, muerte. Oportunidades, desplantes. Reflexiones íntimas, reflexiones universales. ¿Por qué no te das la oportunidad y lees estos fragmentos? No dudes en descubrirlo.
