VEINTINUEVE

1.1K 157 13
                                    

Dedicado a anakhg30

***************

ZAYA:

Oigo el incesante timbre de mi celular pero me resigno a levantarme, mis ganas de afrontar el mundo hoy son nulas pero aún me obligó a atender. Veo el identificador de llamadas, el número es internacional por lo que supongo que ha de ser Alexander.

— ¿Si? — digo casi bostezando la palabra.
Mi bella Zaya, ¿Cómo has estado? — pregunta una galante voz del otro lado.
— Bien bien — intento recomponerme pero los brazos de Alejo me empujan de nuevo a la cama.
Llamo solo para decirte que el lanzamiento de línea de otoño-Invierno se ha pospuesto un tiempo y que probablemente no será lanzado hasta mediados de Julio.
— Wow, eso es malo...
No del todo, el incendio nos ha dado un poco de fama a nivel mundial así que estoy más que seguro que seremos la sensación en la presentación.
— Vaya, entonces me esforzaré el doble — murmuró algo sorprendida.

— ¿Quién molesta a esta hora? — pregunta Alejo casi pegándose al móvil.

¿Tienes compañía? — inquiere Alexander al oír su voz.
— Algo así — contesto sin saber cómo afrontar la situación.
Ya veo, será mejor que te llame el otro momento. — su voz cambio por completo.— Tienes dos semanas libres, al finalizar deseo ver adelantos de tus trabajos.
— Bien, así será...
Tal vez vaya a verlas al finalizar mayo, deseo verte pronto.
— Será un gusto volver a verte.
Adiós mí bella...

Colgó sin esperar respuesta.

Se molestó — dijo Alejo volviendo a acostarme.

— ¿Que haremos hoy? — preguntó cambiando de tema rápidamente.

Me acurruca entre sus brazos y besa con ternura mí frente, me siento protegida y querida ante el cálido contacto con su piel.
Entonces me gira abrazándome, siento su aliento en el cuello y sus manos acariciando mí estómago.

Quiero quedarme en la cama contigo...

— No — contradigo — Vamos a hacer algo productivo.

Puedo hacer muchas cosas productivas aquí contigo — intuyo como una sonrisa socarrona se forma en sus labios.

— Vayamos a la playa — propongo girando de nuevo y viéndolo con una sonrisa.

Hay mucha gente, estaremos como sardinas en una lata — protesta.

— Dónde te llevaré no hay nada, ni nadie — comentó cortando la distancia y robándole un beso fugaz.

— ¡Ya! — exclama — me convenciste totalmente con ese beso. ¿Así conquistaras mí corazón? — pregunta subiendo arriba mío y llevando mis manos hacia la cabecera de la cama para que no me pudiera defender. — ¿Utilizarás esos besos como artillería pesada? —no puedo contener la risa— ¿Desataras una guerra con esa sonrisa encantadora? ¿Tus caricias serán las municiones?

— Que cosas dices — no puedo evitar sonrojarme con sus palabras.

— ¿Cuál será tu arma secreta? ¿Tus labios? ¿Tú sedosa piel? ¿Tú ojos?

VOY A ESPERARTE |COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora