"banana brain" - tordtom

o n c e

ya toda la fiesta había pasado.

el sol se mostraba entre algunas nubes y su brillo se reflejaba entre la ventana de la habitación de tord.

justo ese brillo pegó en sus ojos, despertándolo con pereza y resaca por la fiesta.

sintió unos finos brazos al rededor de su cuello, creía que era de alguna zorra de las que estuvo en su fiesta.

pero cuando terminó de abrir sus ojos, notó que no se trataba de ninguna zorra, sino del pequeño británico, el cual estaba dormido a su lado.

al verlo se asusto, separándose de manera algo brusca sin querer.

¿qué había hecho con su bebé?

vió como este comenzaba a despertarse, haciendo que su respiración se acelere un poco, tenía miedo de como pueda reaccionar el contrario.

—buenos días, daddy.— le dijo de manera suave para después juntar sus labios en un corto beso.

—buenos días, lindo.— le contestó, cambiando su expresión a una más tranquila, acercándose nuevamente a este para darte otro beso pero esta vez más largo.

el más bajo correspondió con algo de torpeza ya que aún no sabía como mantener un beso.

pero su momento fue interrumpido por un grito que thomas reconoció enseguida.

el chico con perforaciones en el rostro suspiró y se separó del menor para pararse de la cama.

luego tomó a su 'bebé' en brazos y se dirigió al cuarto del que salían tantos gritos.

al abrir la puerta de la habitación se encontraron con matt golpeando con un almohadón al polaco, quien trataba de defenderse.

tord dejó con cuidado al menor en el piso y le arrebató el almohadón al pelirrojo.

—patryk, no puedo creer que un niño menor que tu te esté pegando y tu no puedes defenderte.— dijo para luego tirarle el almohadón en el rostro.

matt se acercó molesto a tom y le tomó del brazo.

—vamonos, tom.— le dijo en un susurro, tratando hacer que salgan de ahí.

—¿y edd?— preguntó antes de irse con este.

—se fue anoche, vamos.— insistió el de lentes.

—e-espera.— el menor se separó de matt y corrió al lado del noruego.

hizo que este se agachara para besarlo de manera corta y suave, interrpiendo la tonta 'pelea' que estaba teniendo con su amigo.

—lo siento daddy, debo irme, te veo mañana en el colegio.— le dijo de manera rápida para después volver con matt.— ¡adios daddy, te amo!— dijo antes de irse corriendo junto con el pelirrojo.

el comunista solo se quedó mirándolo con una sonrisa algo boba, si que ese chico lo volvía loco.