Extra#1

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Capítulo Extra #1:

Alexander, entre tanto cansancio, pudo haberse desmayado en la cama. Llevaba minutos ahí acostado, mirando al techo, solamente pensando; pasaba de un pensamiento a otro y a veces se repetía a sí mismo y repasaba sus propios pensamientos. Iba cerrando sus ojos cuando escuchó un murmullo afuera de su habitación, él primero decidió ignorarlo pero llegó a un punto en que los murmullos eran como un eco que viajaba de la habitación hasta tatuarse en el cerebro del chico, imposible de ignorar así.

Así que, Alexander, caminó cuidadosamente hasta la puerta. La abrió unos centímetros y echó un vistazo hacia fuera. Estaba Hercules, el reloj de manto, dándole la espalda a Alexander y quejándose en "voz baja" de Monsieur Lafayette.

— ¿Por qué tengo que hacer yo el trabajo? ¿desde cuando es él el que da las órdenes? — se preguntaba el reloj a si mismo, sonaba molesto.

— ¿Por qué le harías caso entonces? — preguntó Alexander detrás de él, abriendo la puerta por completo. Al parecer Hercules no había notado su presencia pues al escucharlo dio un salto del susto.

— ¡Ah, Señorito! — se volteó el reloj — ¿Estaba escuchando...?

— ¿No eres tú su jefe? ¿Por qué le harías caso?

Hercules soltó un suspiro — Por que estoy seguro que después nadie lo hará si no soy yo.

— ¿Hacer qué?

— Arreglar este hueco — dijo Hercules, dando dos pasos a la derecha, dejándole ver a Alexander el hueco en el que él casi mete el pie momentos atrás. — ¡Ah! — exclamó el reloj, como dándose cuenta de algo. — Pero usted no debería estar hablando conmigo, de seguro está cansado, debería estar descansando. — decía mientras hacía un intento fallido de empujar a Alexander dentro de su habitación, pero realmente no lo movía ni un milímetro. Una de las desventajas de ser un reloj.

— Siendo sincero, no soy capaz de tomar una siesta. — Dijo Alexander, mirando hacia abajo como Hercules hacia su mejor esfuerzo para empujarlo. — De todos modos, — se agachó y detuvo los intentos de Hercules empujándolo suavemente con una mano. — Tengo ganas de ayudarlo, Monsieur Hercules, ¿supongo?

— ¡Oh, qué mal de mi! se me había olvidado por completo de que no me había presentado correctamente. Soy Hercules Mulligan, el mayordomo del amo Laurens.

La presentación llena de confianza y orgullo que dio Hercules hizo sacar una sonrisa de parte de Alexander. — Un gusto, soy Alexander Hamilton. Puedes decirme Alex si deseas.

— ¡Bien, Alex, puedes decirme Hercules también! — después, se volteó a mirar al hueco en el suelo. — Es bueno recibir de tu ayuda pero... ¿como se supone que arreglaremos esto?

Al final, no lo arreglaron del todo, por que ninguno de los dos tenía idea de cómo hacerlo. Solo rellenaron el hueco con cosas resistentes para que nadie salga terminado.

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buenaaas, perdón por la tardanza, he entrado al colegio y me he mantenido ocupada, pero ahora que estoy al día podré actualizar más seguido :-)

este es un capítulo extra, está situado entre el cap 6 y 7

la idea de los capítulos extra los iba a mantener para cuando terminara la historia, pero como el capítulo que sigue me está tomando mucho tiempo de escribir (por que es una de las escenas mAS DIFÍCILES DE ESCRIBIR AH) quería regalarles algo (?

estoy tratando de ponerme un horario para las actualizaciones de este fic para actualizar seguido y terminar rápido, probablemente el próximo capítulo salga este fin de semana, haré mi mejor esfuerzo (?)

La Bella y La Bestia | LamsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora