Yuto suspiró, sabía que no iba a ser fácil, colocó su guadaña delante suyo sosteniéndola con ambas manos y esperó. La esfera de energía en los puños de Sora se separó entonces en esferas más pequeñas y éstas se convirtieron en rayos que se lanzaron contra el enemigo. Para su completa frustración Yuto solo hizo un movimiento con su arma y cortó efectivamente todos y cada uno de sus rayos. Bien, no se rendiría tan fácil, le enseñaría a ese general presumido a no subestimarlo.

Se desató entonces una pelea aérea de rayos de energía, sin embargo mientras Sora los usaba para atacar a Yuto e intentar derribarlo el hombre usaba su energía para bloquear sus ataques, aún así, en ningún momento lo atacó con el filo de su arma ¿por qué?

Cuando hubo gastado una buena parte de su energía se detuvo jadeando, Yuto a un par de metros delante suyo -No creas que has ganado- gruñó el chico de cabello celeste.

-Tu eres de Fusión- dijo Yuto sorprendiendo a Sora -sabes que tu punto fuerte no es el aire, debiste de haberte retirado en cuanto salté del edificio-

Sora gruñó, su pequeño cuerpo temblando por la ira, ese maldito de Yuto lo sabía, sabía desde un principio cuál era su debilidad y había tomado ventaja de ello, sin embargo aunque Sora reconocía sus debilidades había creído que con su energía sería suficiente para vencer al hombre de la guadaña, no había sido así.

-Ríndete, ni aún en tierra tienes probabilidades de derrotarme- contestó Yuto haciendo rabiar más a Sora, claro que esa no era su intención, quería terminar esa lucha lo más pronto posible, quería terminar su misión rápidamente, quería... quería ir a vigilar a cierto chico de ojos color carmesí.

La repentina risa que soltó el chico de cabello celeste lo desconcertó un poco.

-Esta bien, tienes razón, mi punto débil es el aire- admitió Sora sonriendo de una manera extraña -sin embargo, estás muy equivocado si crees que me iré sin darte tu merecido maldito- apenas terminó de decir eso se lanzó con fuerza contra Yuto, sabía que el hombre lo bloquearía con el asta de su arma, aprovechó entonces para taclearlo lo más fuerte que pudo.

Unos metros más y lo tuvo donde quería. Yuto lo apartó de si, pero estaban cerca de uno de los edificios de la ciudad, invocó entonces una de sus más fuertes ataques y la tierra empezó a temblar.

Yuto, por supuesto no tardó en darse cuenta, mentiría si dijera que no estaba ni un poco sorprendido por el hecho de que Sora pudiera manipular la tierra sin estar en contacto con ella sin embargo también sabía lo que el chico planeaba y... era una locura.

+++++

Yuya se detuvo en medio del aire cuando se dio cuenta de que la tierra empezó a estremecerse ¿qué estaba pasando?

-¡Yuya!- Shun se acercó volando -¿dónde está Sora?- preguntó

-Está peleando con el chico de la otra vez, con Yuto- contestó Yuya mirando con horror cómo la gente gritaba en pánico y corría intentando ponerse a salvo pero eran continuamente detenidos por las máquinas invasoras.

-Maldición- dijo Shun mirando a Yuya -intenta poner a la gente a salvo, no luches contra las máquinas, debo ir a detener a Sora, esto es obra suya-

El hombre no esperó a la contestación del chico de ojos carmesí antes de despegar en dirección a donde podía sentir el despliegue de energía. Yuya lo miró irse e intentó hacer lo que le habían pedido, sin embargo, cuando vio un edificio empezar a derrumbarse sintió un chispazo de energía recorrerlo y sabía que tenía que ir, tenía que estar ahí.

+++++

-¡Detente ahora!- ordenó Yuto pero era inútil, Sora estaba decidido a derrotarlo, no importaba los daños que los terremotos provocaran en la ciudad.

Gravity of youWhere stories live. Discover now