Gracias a una mudanza

37. Como la diecisieteañera quiera

POV Dylan

-Dyl, ¿dónde están los demás? Nicky se está poniendo paranoica.

-Estoy llamando a Edward pero no me lo coge, pone que no tiene cobertura, y es lo mismo con Liam.

-Emily tampoco tiene. Dylan, ¿a qué zoo habéis dicho de ir?- abro mi boca  para responder pero luego la cierro. -No os habéis puesto de acuerdo, ¿verdad?- niego disculpándome con la mirada. -No te preocupes, ¿en qué zoo estamos?

-The Animals of L. A.

-¿Y no tienes una idea de dónde pueden estar los demás?- pienso un poco pero mi mente está en blanco.

-Probaré a llamar a James y a Sophie.

POV Austin

Bajamos del coche encontrando a Ellie y James bajando del suyo.

-¡Sophie, Austin! ¿Y los otros?

-Eso iba a preguntarte a ti, James.

-Estarán por llegar.

Al pasar 10 min, nos damos por vencidos y llamamos cada uno a una persona. Yo a mi melliza, Soph al suyo, Ellie a Emma y James a Dylan. Los 3 primeros están sin cobertura, pero Dylan si responden.

-¡James! ¿Dónde estáis?

-En el California's Zoo.- se escucha un facepalm del otro lado.

-¿Estáis sólo Ellie y tú?

-No, también están aquí Soph y Austin.

-¿Y Edward, Liam, Emily y Emma a qué dichoso mundo se han ido?

-Al de los animales.- bromea James  recibiendo un golpe de parte de Ellie.

-Al mundo de los animales... ¡Eres un genio, James!- exclama Sophie dejándonos extrañados.

-Obviamente.

-¡Están en el Animal's World! Claro, Edward iría allí para recordar viejos tiempos.

-Yo no recuerdo haber estado en ese sitio en mi vida.- habla Dylan del otro lado.

-Tú no, pero Emily, Austin, él y yo si. Nuestros padres nos llevaron una de las veces que nos juntamos todos hace alrededor de una década.- explica Soph haciéndome recordarlo.

-¡Ahhh, es verdad!

-Vayamos al Animal's Wold, nos vemos en media hora, Clifford.- James cuelga y cada dos volvemos a nuestros respectivos coches.

POV Emily

Nos encontramos viendo a los pingüinos Edward y yo solos puesto que hemos juntado a traición a la pelirroja y al castaño.

Pidieron voluntarios para alimentar a las llamas y como curiosamente pasamos por allí, Edward y yo gritamos que Emma y Liam adoran a las llamas, así que ahora mismo se encuentran dándoles de comer juntos, a ver si arreglan lo que les ocurre.

-Me siento como si volviera a tener 7 años.- habla Edward mirando a los pingüinos con la misma emoción que cuando era pequeño.

-Estás tan emocionado que como cuando los tenías. ¿Por qué te gustan tanto los pingüinos?

-Se parecen a mí, le gusta el frío, nadar, el pescado y vestir de blanco y negro.- río ante su parecido con los pingüinos.

-Sabes que todo eso no les gusta si no que son sus características, ¿no?

-¡Claro, no soy tan estúpido!

-Eso se puede cuestionar.

-¡Ey!- protesta haciéndome reír de nuevo.