Capítulo 22 | Los 2 Cuadros Impecables

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-Estas idiota?? Que hiciste!!, acabas de destruir evidencia!!

-No pasa nada Lena, tranquila, las cartas reales están en tu bolsillo derecho, anda checalo...

Lena metió la mano y comprobó que efectivamente, allí estaban.

-Oh, tú debes de ser sasha Dragunov, creeme que estuve intentando labrarme un puesto reconocido en el corazón del maestro y la señora, pero siempre parecías estar tú.

-Kirov por favor -le espetó la mujer.

-Bueno me voy, avisadme si pasa algo

-dijo mientras se daba la vuelta y volvía a salir por donde había entrado

Sasha parece ser que fue un gran mago, pensó Lena, me pregunto si también es capaz de desaparecer o disfrazarse o cambiar la voz, maldito sea

-¡¡Mamá mamá!!

gritó una voz infantil & Una niña de unos siente años entró corriendo y se enganchó a una pierna de la mujer

-¡Vamos a comprarme el vestido para mañana

-Lo siento mi niña... Pero mamá no va a poder ir hoy cariño

-¡Me lo prometiste! -dijo con lágrimas en los ojos- Tú y papá son unos mentirosos, ¡él me dijo que iba a estar para mi cumpleaños pero aun no ha vuelto de su último viaje

La niña comenzó a llorar y a Lena se le formó un nudo en el corazón, pobre criatura

-No te preocupes bebé, ¿qué tal si vamos tú y yo de compras? -le dijo Ariana

-¡Sí

Las dos se despidieron y salieron a la calle

-Bueno, bueno, yo voy a hacer la cena si nos les importa -dijo Hanzel caminado en dirección a la cocina

-¿Siempre hace él la comida? -le preguntó Lena a la mujer cuando se hubo ido.

-Sí, le encanta cocinar y siempre se ofrece

Fueron al estudio de su marido, un sótano muy bien equipado para trucos de magia. Se dieron cuenta de que en la pared superior habían muchos cuadros colgados, todos ellos eran fotos de magos

-¿Quiénes son? -preguntó Lena

-Son todos aprendices míos o de mi marido, los más destacados o nuestros preferidos

-¿Y esos dos cuadros?

-preguntó señalando dos que estaban al lado.

-Esos son Sasha y Oleg. ¿Por qué preguntas?

Lena los miró mejor, Sasha es igualito al maldito Asesino de Nessun Dorma, aunque en persona era algo diferente al chico del cuadro, a Lena la sangre le hervía pero no podía decir nada, por lo menos no aún

-Porque son los dos únicos cuadros que no tienen polvo

-Eso se debe a que Sasha es mi aprendiz favorito, y Oleg era el de mi marido, desgraciadamente Oleg murió hace 14 años durante un ensayo antes de un espectáculo.

-¿Esta habitación está insonorizada verdad? -le preguntó Sasha.

La mujer pestañeó varias veces, atónita. Se llevó las manos a la cara y se las pasó por las mejilla.

-Sí, ¿cómo lo has sabido? -su voz sonó apagada, sorprendida.

-Al entrar he tocado una pared y era bastante gruesa, las demás de la casa no son así.

-Es verdad, a mi marido le encantaba la música clásica, así que mandó a insonorizar toda la habitación para poder ponerla al máximo y no molestar a nadie.

Lena y Sasha dieron un rodeo por la habitación hasta que se toparon con la cinta policial que dibujaba el cadáver en el suelo.

-Sasha, ¿no te parece que el cadáver está en una posición bastante rara para ser alguien que ha muerto envenenado?

-¿A qué te refieres? -preguntó la mujer.

-Lena se refiere a que la gente cuando muere envenenada suele llevarse las manos a la garganta o a la barriga por la asfixia, pero las manos están colocadas de manera extraña debajo del cuerpo como puedes comprobar.

-¿Cuándo encontraron el cuerpo estaba atado? -le preguntó Lena a Daria.

-Pues no, los policías y nosotros mismos comprobamos que no tenía ataduras, aunque aquí hay muchas cuerdas para los trucos.

Sasha vio un gran cuadro de su mentor y se dio cuenta de que llevaba anillos en todos los dedos.

-¿Siempre llevaba anillos? -preguntó.

-Sí -contestó la mujer- Su truco favorito era uno en el que ponía finas cuerdas en los anillos y las ataba a objetos, y eso hacía parecer que volaban.

-Ya lo tengo -dijo Lena- Antes me preguntaba que porque no había salido de la habitación para pedir ayuda, pero ahora lo entiendo, si que estaba atado. Pero ataron sus anillos con esas finas cuerdas, por lo que cuando quisiera separar las manos no podría, y es muy difícil moverse con las manos de esa manera. Y cuando la policía le quitara los anillos no quedaría evidencia, ya que el asesino ya hubiera cortado las cuerdas.

-¿Fueron ustedes los primeros en encontrar el cuerpo? -habló Sasha.

-Sí.

-Entonces el asesino es uno de los tres aprendices.

Lena asintió y Daria se llevó las manos a la boca.

-¿Después de encontrar el cuerpo que hicieron? -preguntó Lena.

-Salimos de aquí corriendo y fuimos directamente a llamar a la policía.

-Pero si aquí hay un teléfono -dijo Lena señalándolo, y efectivamente, encima de la mesa, había un teléfono.

-Sí, pero en ese momento estaba enterrado bajo una pila de cartas, por lo que ninguno caímos en la cuenta de que estaba allí.

Fueron hasta el teléfono y Lena se dio cuenta de algo, las cartas pegadas tenían la misma forma que uno de los botones.

-Mira Sasha.

-Seguro que dejó el mensaje para que supiéramos quién es el asesino.

-Pero no lo entiendo -se quejó Daria- ¿Por qué no llamó? Es decir, con las manos atadas pudo haber marcado, es fácil.

-El asesino soltó el cable de la línea, pero cuando encontraron el cuerpo lo conectó, hizo lo mismo con las cuerdas con las que lo había atado.

Lena apretó el botón, pero no marcó ningún número, en cambió salió una secuencia:

*66*3*2*777*444*2*66*2*

El Asesino de Nessun DormaWhere stories live. Discover now