Servamp One Shots ★Servamp x Lectora★.

Lawless-

—¡Shakespeare! —volví a mencionar con la esperanza de que esta vez su supieran quien era.

Ellos negaron y yo di un suspiro.
Me levanté de ahí ignorando sus burlas y salí de la casa sin importar que me siguieran o incluso se preocuparan (cosa que sería imposible) saqué la pequeña botella que había en mi chamarra y comencé a tomar el vino que había en ella.
Soy muy dramática pero es lo que las obras de Shakespeare me enseñaron.

¡Aún sigo sin entender como es que están en un club de lectura sin que sepan quien es Shakespeare! Es como si les preguntaras sobre Edgar Allan Poe o el señor Shir Arthur Conan, mucho menos lo conocerían, ni con Louisa. Aún peor si con escritores japoneses vamos que sepan quien es Ranpo o Dazai sería como un sueño.
Ahora que lo pienso tal vez la lógica de que estén ahí adentro es por alguna obligación o incluso ordenes de sus mamis.

—“¡Ah, Romeo, Romeo! ¿Por qué eres Romeo? Niega a tu padre y rechaza su nombre, o si no, júrame tu amor y ya nunca seré una Capuleto.” —Le dije a la nada suspirando.

¿Tan difícil era conocer una obra trágica? A mí también me gustaría que alguien me declara su amor así, aún si los dos terminamos muriendo.

—“Te tomo la palabra. Llámame sólo “amor mío” y seré nuevamente bautizado. ¡Desde ahora mismo dejaré de ser Romeo!” —escuché la respuesta de alguien a mis espaldas haciéndome voltear rápidamente.

—¿Quién eres tú? —pregunté mirando al chico que se encontraba frente mío.

Él río, se acercó a mí haciéndome retroceder... Antes de que me acorralara me hice a un lado quedando detrás de él.

—Si hubieras dicho unas pocas palabras más, hubiésemos podido seguir citando lo diálogos —dijo.

Negué rápidamente, él volvió a reír.

—Soy Lawless —se presentó.

Genial, otro tipo con un nombre raro que añadir a la lista, aunque he de resaltar que el nombre es muy bonito y llamativo. Igual me presenté algo confundida y acosada...
Vi que realmente era muy de noche (como típica historia cliché de terror estaba sola en aquel parque) así que me tuve que despedir rápidamente de él y comenzar a caminar con velocidad de regreso hacía mi casa.
Justo cuando iba a medio camino pude ver a un pequeño erizo temblando.

—¡Oh! Pequeño... —me acerqué rápidamente a él —verdaderamente hace frío... Te agarraré, lo haré con cuidado...

Lo agarré tal cual lo dije y después lo acerqué a mí poniéndolo debajo de mi sudadera intentando no pincharme con sus púas, miré para todos lados e incluso traté de buscar algún collar o algo entre el erizo pero al parecer no era de nadie ni tenía información alguna.

—Bueno... Tal vez vayamos a mi casa y me ponga a leer contigo... ¿Trabajos de amor perdidos? —reí. —Es una de las pocas obras que no conocen de Shakespeare, quien pensaría que algo tan trágico como Romeo y Julieta sea tan popular... Sería incluso demasiado hermoso que tu amor se suicidara contigo, ¿algo así?

Negué al darme cuenta de la locura que era hablar con un erizo.

—Ya sabía que escribir por Hobby y leer me haría mal... —negué y acaricié al erizo —vayamos a casa... A tú nueva casa.

No sabía porque sentirme mal; porque sentía que secuestré a un erizo o por el tipo que me encontré aleatoriamente en el parque, las dos eran raras o incluso... Extrañas.
Me di una palmada en la cara cuando recordé que había olvidado mi mochila en el supuesto club.
Dejé al erizo en el piso al entrar, fui hacia la cocina y el erizo me siguió ¡ahorrandome el trabajo, perfecto!
Saqué mi celular y me puse a investigar que comían los erizos al igual que como es su comportamiento, realmente no tenía idea alguna.