One shorts, All ships DC

La muerte del petirrojo.

Damijay.

La vida no era tan buena como se la proponían o quizás llego a pensar, lo sabía estaba marcado desde el momento que nació, desde el momento que su madre lo cargo en brazos y le dio una espada, desde el momento que fue asesinado como despreciado por aquella mujer que antes llamo madre... Lo sabía, y aún así quizo creer que quizás tendría un final feliz, pero se equivocó, nunca tendría un final feliz y menos con aquella maldición que cargaban sobre su espada, todo lo que le importaba o todo aquello que quería siempre se alejaba, lastimaba o terminaba despreciándolo y en el peor de los casos la muerte; no era mentira él vio y vivió, sus antes llamados amigos uno a uno lo fueron abandonando Maya, Colin, Jon... Hasta su propio padre y su disque familia le dio la espalda, quedo solo y a la deriva en aquel mundo cruel.

Quizás fue porque se apiadó de el, o quizás solo era mera curiosidad de saber hasta dónde llegaría aquel forajido le tendió una mano y un techo donde resguardarse después de ser hechando de su hogar, aquella persona le enseñó a abrirse más a sus sentimientos y a buscar por sus propias manos lo que necesitaba, trabajo, estudios, todo lo que le fue arrebatado lo fue recuperando con el esfuerzo y sudor de su frente. El día de su graduación en leyes no invito a su padre en su lugar llevo aquel muchacho de ahora 30 años a su celebración, el que no le dio la espalda por muy hijo de puta hubiera sido con él.

Siguió viviendo en compañía de aquel petirrojo de alas rotas, de aquel paria que era un muerto viviendo entre los vivos, un alma que merecía estar en descanso eterno más eso no pasó. Su convivencia paso de lo simple compañerismo y camaradería a una relación clandestina de amor, un amor prohibido no por ser hermanos sino porque el mayor había sido reclamado antes por quien compartía sangre, su padre, Bruce Wayne, un alfa que no dudó en encajar sus dientes en la piel tierra del antes adolescente omega, Jason Todd. Ún omega que murió y aún regreso a la vida su marca no fue borrada por las aguas del Lázaro, siguió atado más no unido en sentimientos recíprocos al alfa porque Jason había muerto para él su enamoramiento adolescente al saber que ese caballero de la noche no era más que un cobarde que no lo salvó en el momento que más lo necesitaba sino que lo abandonó a su suerte y a manos del desquiciado payaso.

Todo estuvo bien, su vida era relativamente buena y cómoda hasta pensaron en casarse y quizás formar una pequeña familia pero primero quería ahorrar lo suficiente para mantener y cuidar al pequeño cachorro que deseaban ambos, como también el irse de Gotham City a otro lugar y abandonar su vida como vigilantes. Sin embrago todo aquello quedo olvidado cuando sin esperarlo o quizás fue un pequeño error de parte de ambos, él omega quedo en cinta obligando a replantear todo pero sin culpar al cachorro en su lugar lo amaron desde el momento que supieron de su existencia, allí inició su mayor alegría familiar pero también debió ser una advertencia de que algo saldría mal, lo malo fue que nunca reflexionaron el que.

-Demonio, ¿Qué sucede?-cuestionó el mayor al ver el alfa preocupado casi pensativo ante algo que quizás lo estaba aquejando de forma silenciosa.

Jason se hubiera acercado a la silla individual que estaba sentado en la sala de estar Damian pero el levantarse del sofá y sumado su embarazo avanzado de 24 semanas estaba imposibilitado por su vientre abultado que no ayudaría en nada a levantarse sin causar mucha molestia a él o su bebé o ambos, desventajas muy grandes y de las cuales empezó a odiar Jason al sentirse cada vez más y más dependiente de lo que le gustaría estar; y como si fuera un milagro el demonio capto su atención y miro a Jason como se levanto y se acercó al omega para que este no hiciera más esfuerzo del debido por querer estar cerca suyo, y claro, sacarle la sopa o el problema que le estaba negando decir.

-Solo estaba pensando en qué lugar podríamos huir lejos de padre, antes que se entere de lo nuestro y de nuestro pequeña cachorra-comento pero para Jason algo le decía que estaba ocultándole algo, parlen parte decía que eran sus hormonas y el instinto de papá omega las que podrían hacerle creer que cualquiera estaba actuando extraño o le escondía algo.