- Serás mío Park Jimin, aunque te resistas.
- Tú no eres nadie para darme órdenes.
Park Jimin es un talentoso actor que tiene un complejo narcisista.
Jeon Jungkook, un joven director de cine quien es fan obsesivo de Park Jimin.
Portada hecha por @Ji...
Seúl - Corea del Sur. Viernes 20 de enero del 2017. 7:45pm
El agridulce líquido color borgoña salió disparado para encontrarse violentamente con ese impecable traje color gris que Park Jimin, el tan famoso actor coreano llevaba puesto.
Eran cerca de las 7.50pm y él se encontraba en un lujoso restaurante con la ahora camisa y traje manchados con vino tinto.
La vergonzosa escena había llamado la atención de los presentes quienes inmediatamente comenzaron a cuchichear por lo bajo escrutándolo en la distancia.
¿La causa de eso?. Sin duda alguna era la sexy pelinegra que se encontraba ahora mirándolo con furia. Vociferando insultos en su contra.
¿Le importaba eso de alguna manera?.
Absolutamente no.
Sobre la mesa tendida de manera refinada, se hallaba un recorte de periódico donde se lo podía ver al guapo pero despeinado y sexy actor saliendo sospechosamente de un motel con una idol tailandesa.
La imagen hablaba por sí misma.
— Ah~ mi ropa se echó a perder.
Mirando su costoso traje de diseñador que había comprado en Italia bufó —,¡Tuvieron que hacerse más de 16.000 puntos de sutura manuales para crear esta obra de arte!
— ¿A quién demonios le importa un maldito traje idiota? — Contestó indignada la mujer que estaba frente a él.
Park levantó suavemente la mirada y la dirigió hacia la ahora endemoniada mujer que estaba parada frente a él. Le regaló una cálida, pero descarada sonrisa que ella solo pudo interpretarla como una burla hacia sus sentimientos.
— ¡Nunca he sido más humillada en toda mi vida! — gritó entre sollozos entrecortados mientras tomaba con rabia su cartera y se precipitaba hacia la salida.
— Lo siento — fue lo único que Park pudo decir mientras observaba como la mujer se alejaba encolerizada del lugar. Podía oír el eco de unos tacones que se impactaban con fuerza contra el piso en ese silencio sepulcral.
— ¿No que tenía mucha clase? — Dijo en sus adentros mientras su sonrisa se ampliaba e intentaba limpiarse el traje.
"click" "click" "click"
El familiar sonido de la cámara tomando fotografías rompió con el silencio y toda la tensión que se había acumulado en el lugar. Haciendo que los murmullos aparecieran de nuevo después de haberse apagado por unos minutos.
— Maldición — susurró mientras tiraba la servilleta sobre la mesa y se levantaba para dirigirse rápidamente hacia la salida. No desvió la mirada hacia ninguna persona antes de salir.
Subió a su vehículo último modelo, de una costosa marca coreana color blanco y se esfumó del lugar en unos minutos.
Al llegar a su domicilio, lanzó las llaves de su auto a un chico para que lo llevara al estacionamiento. Se encaminó hacia el asensor de aquel edificio y presionó el botón que lo llevaría al último piso del mismo.
Park Jimin vivía en un lujoso penthouse reservado sólo para una de las más famosas celebridades coreanas.
Al ingresar a su departamento se encontró con unos ojos grises que lo observaban con recelo.
Kim Tae Hyung se encontraba sentado en el gran sofá que se extendía por uno de los costados de la habitación. Su mirada apuntaba en la mancha que traía en su traje.
— ¿Qué hiciste ésta vez?—, preguntó sugerente el castaño.
— Fue un accidente —, se limitó a decir el rubio mientras se dirigía al baño a asearse.
Cuando Park salió del baño completamente refrescado y limpio, volvió al living para enfrentarse al interrogatorio de Taehyung.
Mientras se servía un trago miró al chico que lo observaba de manera desconfiada.
— ¿Ahora me dirás que pasó? —, repitió.
— Ya te dije que tuve un accidente Tae, fui a cenar y sólo pasó.
— Está bien, pero no te creo. Te conozco demasiado bien como para hacerme pasar por idiota. Como sea. ¿Puedo irme ya?, tengo que ir a cerrar un contrato y estoy llegando tarde, por tu culpa. Ya son casi las 20.30hs. No puedo ser tu niñero todo el tiempo Jimin —, dijo mientras cruzaba sus piernas y extendía sus brazos por lo largo del sofá.
— Nunca te pedí que lo fueras Tae, tú lo haces porque quieres. Eres molesto.
— No me jodas Jimin, sé que lo disfrutas, sólo me tienes a mí pequeño — Afirmó soltando una sonrisa burlona.
— No me digas pequeño. Idiota. Tengo 27 años y mido 1.73cm, ¿eso te parece pequeño?. No es mi culpa el no ser anormalmente grande y estúpido como tú.
Cualquiera que los viera diría que esos dos estaban discutiendo, pero eso no podía estar más alejado de la realidad.
— Oye tranquilo viejo, solo estaba bromeando. Sabes que te lo digo de cariño. Y además no soy estúpido, te pasaste.
— Para qué me molestas si ya sabes como me pongo? — Jimin rodó ojos evitando sonreír.
— Me encanta molestarte Minnie — Taehyung puso una muy grande y cuadrada sonrisa en su rostro.
— Como sea. ¿No que ya te ibas? Has estado hablando sin parar por 15 minutos desde que entré al departamento. Ah, no me digas, ya lo sé. Es que soy tan jodidamente adorable e irresistible que pierdes la noción del tiempo mientras estás conmigo —, guiñándole el ojo y echó su cabello hacia atrás.
— Para con eso. ¡Estás loco! — Taehyung exclamó graciosamente mientras tiraba una almohada hacia la cara de Jimin, quien por poco logró esquivarla.
Mientras Jimin acomodaba su húmedo cabello, su mirada se dirigía hacia el más alto mostrando todos sus blancos y bien formados dientes. En una sonrisa que subía hasta los hermosos ojos color miel que poseía, trazando una línea recta que casi los hacía desaparecer.
Jimin tenía una sonrisa muy hermosa.
— Buenas noches "Su Majestad" — Haciendo una burlona reverencia Taehyung se despidió y salió de la habitación. Dejando a un Jimin quien no podía parar de reír.
Sin más cosas que hacer. Luego de todo lo acontecido esa noche. Cansado como estaba, se dirigió hacia su habitación. Y de un salto se tiró sobre su cómoda y suave cama quedándose dormido casi inmediatamente.
A la mañana siguiente, un no muy contento Kim Taehyung fue a visitarlo.
— ¿Qué significa ésto Jimin? — le puso un periódico en el rostro.
— ¿Un accidente? — encogió los hombros con una sonrisa algo forzada.
— ¡PARK JIMIN!
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Jimin es la cosa más bonita y perfecta que pudieras llegar a ver en toda tu vida. Es tan hermoso, tanto que duele. Me duelen mis ojos y mi corazón AAAH! 😭💞 No puedo soportar tanta dulzura ❤
Seguiré editando a medida que suba los capítulos. Por favor avisen si encuentran algún error.
