Especial Chanbaek 1

289 23 0
                                    


Pov Channy

Desde que pasó lo de Kai, el ambiente en el cielo no era el mismo, mis ángeles andaban desanimados y con miedo de que alguien más nos pudiese triacionar.

Un día hice una reunión en el gran salón para tranquilizar a los ángeles y de alguna forma desahogarme. Fue bastante bien. Ese día me presentaron a Chen, un pequeño con un gran potencial en su poder, el trueno, era el mejor de su clase. Desde ese día nos reunimos varias veces hasta que al final comenzamos a ser grandes amigos. Pero mi vida ya no era la misma, me sentía deprimido de algún modo, hasta que apareció él.

Últimamente cuando mandaba recados a mis ángeles y a Chen notaba que alguien me observaba. Al principio no le di ninguna importancia, pero poco a poco esa presencia fue aumentando más. Empezaba ya a molestarme hasta que un día me giré y lo vi. Era un ángel muy bello, con el pelo plateado y cara de cachorrito. Cuando notó que lo observaba fue corriendo junto a sus amigos. Raramente desde ese día ya no lo volví a notar. ¿Le pasaría algo? Me pregunté.

Dos semanas después me dirigía hacía mis aposentos, cuando lo vi a la lejanía caminando con sus amigos. Se acercaban hacía donde yo estaba. Sus amigos parecían insirtirle en algo porque iban zarandeandolo de un lado a otro. Me quedé en la puerta de mi habitación observandolos, me hacían bastante gracia, sobretodo el ángel de cabello plateado. A unos metros de mí, los 3 ángeles se quedaron quietos entre sonrisitas, viendome a la cara. Dos de ellos comenzaron a empujar al pequeño del pelo plateado hacía mí. Yo decidí abanzar hacía ellos para ver que es lo que les hacía tanta gracia, pero cuando estuve a un metro suyo, el pequeño salió corriendo. Sus amigos fueron detrás. Me estraño su reacción, otra vez de nuevo huyo de mí.

A la mañana siguiente me dirigía a ordenar unos asuntos cuando comencé a oir un llanto. Afine mí oído para ver de donde provenía y lo encontré. Para mi sorpresa era ese pequeño ángel. No dude en acercarme a él para consolarlo y ayudarlo en lo que fuera que le pasará o preocupase. Toqué su hombro suavemente para no asustarlo, cosa que no funciono porque pegó un gran brinco y se giró. La cosa fue a peor cuando me miró a la cara. Su rostro se volvió pálido, como si hubiese visto un demonio o algo peor y cubrió sus ojos instantaneamente.

-Oye pequeño ¿Qué pasa? ¿Soy tan feo que por eso te cubres?-dije intentando animarle.

Él angelito no respondía y seguía cubriendose los ojos. Lo cogí y lo rodee con mis brazos. Quería hacerle saber que conmigo estaba a salvo y nada debía de preocuparle. Noté como su corazón se aceleraba. ¿Me tendría miedo?

-¿Estás bien? ¿Te doy miedo?

En ese instante el pequeño descubrió sus ojos y miró a los mios. Negó con su cabecita y yo le sonreí. Noté como se sonrojaba levemente. Cuando ya lo vi más calmado decidí volverle a preguntar.

-Bueno dime ¿Que haces aquí solo llorando? ¿Te ocurrió algo?

-No señor todo esta bien.-Vi como apartaba su mirada de mí.

-No lo creo, estabas llorando mucho, puedes confiar en mí.

-Todo esta bien señor.-Tomo una pausa.-Si... si se lo digo.. us-usted me odiara. -El pequeño comenzó a tartamudear, parecía nervioso.

-¿Porqué tendría que odiarte?¿Hiciste algo malo?

-No, no, no... es que...

-¿Es que...?

-Us-us-usted me-me-me...-cogí sus manos parecía que le daría algo.

-Tranquilo pequeño puedes decirlo.

-Usted me gusta señor.-Inmediatamente dehizo mi agarré y cubrió de nuevo su rostro.

Me sorprendió oír eso de un ángel tan pequeño. Me quedé pensando en que decirle, la verdad me quede sin palabras.

Lo prohibido (CHENMIN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora