2:12

70 9 1
                                    


Me encierro en un bote de cristal y te observo bailar con la luna desde mi diagonal obstruida.
Qué putada, mi vida. Tú tan de papel y yo tan de perder, la locura perfecta para una noche tan tremenda.
Respira, bestia, desde estas fosas nasales repletas de bacterias y animales y mírame con esos ojos bañados en sangre, que precipitarán al vacío en cuanto yo te cante.
Ayúdame a sobrevivir en esta locura de vida en la que ya no estás, que nada tiene sentido si te vas, que te he escrito demasiados poemas ya para que sepas que necesito tus quejas y tus gemidos, necesito tu vida y tu himno de igualdad rebotando contra la estatua de la libertad.
Joder cuánto te echo de menos, es que todavía no lo comprendo. Por qué irse de casa cuando te dan de comer y por qué dejar de beber si tienes agua. Son preguntas sin resolver que mi corazón ampara una y otra vez a las dos de la madrugada.
Y vuelves para recoger los pedazos de mi alma, atropellados por tu coche al terminar la jornada. De vuelta a casa dices, pero qué casa si tu hogar son mis brazos y mis besos y tus ganas vivir nuestra vida lejos, muy lejos.
Si este triste y desgarrador poema no te hace reflexionar, juro que me voy a marchar
y nunca más volverás a mi vida convertido de nuevo en un suicida.
Hasta nunca chico huracán.

Lady Madrid

Moi-même ©️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora