¿Amor o Deber? - Ciel y Lizzy

Capítulo 10

No logro conciliar el sueño, intento dormir pero estoy muerta de nervios y desconozco el motivo, ni que fuese a ocurrir algo. Tal vez si me levanto y doy unas vueltas por la casa podre despejar mis pensamientos. 

Lizzy choca con un mueble y genera un sonido que es escuchado por Sebastian que estaba revisando que todo este en su debido lugar. 

- Ah, dios.- Sebastian da un leve toque en la puerta.

- Disculpe señorita ¿Se encuentra bien?

- Si, solo que me levante un segundo. - abre la puerta para hablar con el mayordomo directamente. - No logro conciliar el sueño, me gustaría caminar un poco por el jardín.

- Como usted desee, le pediría que se abrigue mejor ya que esta noche es fresca y no seria correcto que se enferme. Si necesita algo más llámeme por favor, estoy a su servicio.

- Gracias.

Sebastian continuo su recorrido, pero al pasar por la puerta de su joven amo genero un fuerte sonido que logro despertar a el Conde.

- ¿Sebastian?- al ver que no había respuesta decide levantarse, se acerca a la puerta y lentamente la abre sin realizar mucho alboroto. En ese momento ve la sombra de Lizzy  caminando por el pasillo y decide seguirla hasta el jardín.

*La brisa es fría pero me relaja bastante... Ciel... ¿Por que me generas lo contrario? necesito que me calmes como antes, cuando me tranquilizaste en aquel barco y me brindaste tu seguridad me sentí tan aliviada.

- Te puedes resfriar si estas mucho tiempo aquí afuera...- la joven se da vuelta y se encuentra con su prometido.

*Ciel... Ciel... 

Lizzy se queda muda cuando analiza la situacion

*Estoy en pijama, que vergüenza, Lady Margaret estaría mas que regañandome.

Él por su parte se sonroja un poco al ver que es incomoda la situación.

- Bueno, te seguí porque me llamo la atención que estés deambulando a esta hora por la casa.

- No podía dormir y quería caminar un poco por tu jardín, pero creo que mejor vuelvo a la habitación. 

- Espera... - Ciel la toma de brazo cuando ella estaba por regresarse - A mi también se me fue el sueño, podríamos conversar un poco

- No, no creo. - Ciel se sorprende de las palabras tan contundentes. - No es correcto que ande con esta ropa a esta hora hablando con mi prometido a solas.

- Lizzy por favor, nos conocemos desde niños...

- Pero ya no somos niños... Ademas pronto nos vamos a casar, esto es mas que una imprudencia.

- Mira, no hay nadie ¿Quien se enteraría de que estamos aquí? Los que habitan esta casa no dirán nada en absoluto.

- Como sea, no es correcto señor Conde.

- ¿Hasta cuando me vas a seguir tratando como si no tuviésemos un pasado en común? Te queda bastante mal el papel de mujer fría. - Lizzy abre sus ojos del impacto de las palabras de él.

- Disculpe Conde, pero este papel de mujer fría no es mas que el de una prometida decente y correcta, así me educaron durante estos años que estuve lejos.

- ¿Donde quedo la Lizzy alegre y divertida de antes?

- ¿Usted se refiere a esa Lizzy que era un estorbo en sus asuntos? A la misma muchacha que usted trataba de evitar y le molestaba sus actitudes con usted. Bien ella ya no existe, para su alivio, ahora estoy yo, la Marquesa Elizabeth Midford una doncella a la altura del perro fiel de la reina. - Las duras palabras de la joven dejaron mas que impactado a el receptor de dicha respuesta.

- Lizzy...

- Por favor Conde, no creo que tenga que decir mas, discúlpeme por pasarme. -Trata de retirarse pero Ciel la toma del brazo nuevamente.

- Lizzy... ¿Acaso crees que eres una molestia en mi vida? Bien es cierto que siempre fui muy poco atento contigo, que no te trate como debía, pero hemos pasado por muchos momentos donde lo que creíamos uno del otro no era tan así.

- ¿De que habla?

- De tu habilidad con la espada, de tu valentía, del enorme sacrificio que hiciste para que me sienta mas cómodo después del incidente... Lizzy nos vamos a casar y es algo tan extraño para mi, pero yo te aprecio mucho y debemos a acostumbrarnos al otro, tratarnos mejor ademas de otras cosas.

- ¿Que sientes por mi?

- Eh, un enorme sentimiento, pero no se bien que es realmente, lo cierto es que si te extrañe en este tiempo...

- ¿Un sentimiento indefinido? - Lizzy se acerca un poco antes de realizar esa pregunta y cuando la finaliza cierra sus ojos y roza sus labios con los de Ciel, este no sabe como responder, finalmente cierra sus ojos y le corresponde el beso. 

En un arbusto se escuchan leves sonido, aunque los jóvenes no los perciben ya que están sumergidos en los labios del otro...

- Wow, miren al joven Ciel... - Baldroy

- Shh nos pueden descubrir... - dice Mey-Rin susurrando

- ¡Se ven tan lindos!- Finni

- ¿Que hacen aquí? 

- Se.. Sebastian... eh.. resulta que...- el mayordomo mira fijamente a los tres y estos se quedan totalmente callados ante esta mirada.

- Todos vayan a dormir o comiencen a realizar sus tareas...- Se retiran sin hacer ruido

Mientras tanto el beso entre Ciel y Lizzy continua, la mano de ella que estaba alrededor del cuello de él, se deslizo hasta el pecho del joven e hizo una suave presión que separo a ambos.

- L-Lizzy...

- Buenas noches Conde.