Capítulo 3

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*Puedo sentir como el carruaje va disminuyendo su velocidad, recuerdo este camino, pero no sé si quiero que esto pare, implicaría el inicio de una larga noche. Se detuvo, están abriendo la puerta lentamente, Margaret coloco ambos pies fuera del carruaje, ahora es mi turno. Mi padre y madre llegaran un poco mas tarde, mi hermano... parece que no planea asistir, él si tiene opción. Me acerco a la puerta, puedo sentir el fresco del aire, el bullicio, carcajadas leves, hay muchos invitados al parecer, Lady me esta apurando que fastidio. Mi pie derecho toca el suelo y luego le sigue el otro, acomodo mi vestido y me dispongo a caminar lenta y delicadamente hacia la puerta principal, pero primero, las escaleras. Por lo que veo desde aquí afuera no hay cambio, todo esta tal cual lo recuerdo.

Elisabeth y Lady Margaret ingresan a la mansión Phatomhive, donde esta lleno de nobles y empresarios distinguidos, todos con vestuarios muy elegantes. Cercano a la escalera principal estaba el Conde Ciel Phantomhive conversando con Lau, quien le presenta a un noble Francés muy interesado en el comercio de la compañía de Ciel. A su lado Miranda, su hermana, una doncella muy bella, tenia el pelo negro, unos bellos ojos celestes bastantes claros, vestía de un rojo muy llamativo que destacaba su piel pálida y perfecta, llevaba un escote bastante visible pero sin verse atrevida o desubicada. Miranda cada tanto hilaba algunas frases para que Ciel la notara y a la vez colaboraba con los planes comerciales entre su hermano y el joven Conde. 

*El Conde Phantomhive es muy apuesto, se comenta que esta comprometido, pero hace tiempo no se la ve por Londres a ella. ¿Será posible que él se interese en mi? Tal vez mi hermano aprobaría mis intensiones.

Del otro lado de la sala...

*No voy ni cinco minutos acá y ya estoy cansada de todos, me miran sorprendidos, ya sea por mi regreso o mi apariencia, creo que estoy muy llamativa con esta vestimenta. Lady me insistió en que deje mi cabello suelto y rizado, pero con dos trenzas que salen del frente de mi rostro hacia atrás, se unen en el centro con una delicada joya. Tengo un vestido violeta oscuro que se va degradando de arriba hacia abajo. El corset esta lo bastante apretado como para que se vea una cintura bien marcada, pero en la zona de los pechos esta algo suelto para no estrangularme tanto. Tiene un moño grande entre el corset y la falda, junto con unas cintas que se extienden hasta el final del vestido. La verdad, casi no me maquille, mi madre opto por algo mas natural, porque para llamativo ya estaba el vestido. 

oh, ahí esta Sebastian..

- Hola Sebastian -dijo, en ese momento él se giro.

- Disculpe señorita ¿Necesita algo? -dice muy amablemente

- ¿No me recuerdas?

- Señorita Elizabeth, bienvenida.

- SI, bueno quería saber.. - Ella no podía terminar la frase, realmente no sabia si estaba lista para verlo, él se percato de esto, sonrió levemente y se giro sutilmente para guiarla hasta su prometido.

Ahí estaba él, con un elegante traje azul marino y unos zapatos algo altos, ella solo lo veía de espalda. *Se ve fabulo, esta mas alto que yo incluso, su cabello esta igual, mi corazón se agita, no puedo ver a la gente a su alrededor, en estos momento es el centro de mi atención.

¿Amor o Deber? - Ciel y LizzyWhere stories live. Discover now