Desesperación (Narusasu)

9

[Antes]

-911, ¿Cuál es su emergencia?-

-Se escuchan gritos en un edificio abandonado, me temo que sea una persona en peligro-

-De acuerdo señor, ¿Dónde se encuentra?-

-En el edificio "Dimitri" entre la avenida 23Green y wallstreet-

-Bien, ¿Qué tan cerca se encuentra del lugar?-

-Estoy frente al edificio-

-¿Puede ver algo?-

-Sí, una camioneta se acaba de estacionar... un chico está siendo cargado por dos hombres-

-Señor ¿Los puede describir?-

-Amm... Son dos hombres altos y corpulentos... El muchacho está atado, él... pelea-

-Los oficiales van en camino, señor, ¿Podría decirme su nombre?-

-Uno de ellos me ha visto, me voy-

A lo lejos y gracias a la luz de la luna se podía observar la silueta de un hombre que, con tranquilidad camina lejos de aquel lugar de ambiente fúnebre, tirando por separado un celular y su respectiva batería por alguna parte de ese desolado y arruinado terreno; mientras pensaba en lo bien que le resultaron las cosas hasta ahora, una sádica sonrisa adorna su rostro algo arrugado por la edad, sabiendo que detrás de él se encuentra encerrado un muñeco de porcelana fina que por error rompió.

-Disfruta reparando mi juguete preferido, Naruto Uzumaki-

La dulce melodía que salía de los labios de aquel personaje resultaba opacada por el sonido de las sirenas de la policía, las cuales daban a entender que en menos de 10 minutos llegarían al edificio.
Cuando detuvo su andar se encontraba en un cementerio bastante hermoso; un terreno espacioso que era cubierto por un brillante y muy bien cuidado césped y lleno de arboles gruesos y frondosos, la verdad no parecía un cementerio pero esto se debía a que, gracias a una vieja tradición, en vez de lapidas se enterraban las urnas y por encima se plantaba una semilla, el cual al pasar de los años, se convertiría en otro hermoso y gran árbol como el que adornaba maravillosamente cada espacio del terreno, en los pies de éste se colocaba una pequeña placa con el nombre del difunto; él se quedo frente a un roble muy grueso y de apariencia joven, en el suelo yacía una placa con el nombre de "Fugaku Uchiha" grabado en él.

-Fugaku... Te equivocaste, siempre gano y la vida de tu hijo es una prueba de ello- declaro con seriedad –Me pertenece ahora y te prometo que luego de destruirlo, lo moldeare a mi manera... Como siempre debió ser-

Con pasos lentos se retiro del recinto, no quiso ir a la tumba de quien fuera su primer y verdadero amor, que por casualidades del destino se convirtió en la esposa del tal fugaku, un nombre o mejor dicho, un hombre que odiaría para siempre; los restos de esa mujer tan hermosa yacían en un templo por razones desconocidas para él, de hecho por casi toda la familia Uchiha –o al menos lo que quedaba de ella- claro, con la excepción del pelinegro menor, que por alguna extraña razón era la única persona que tenia dicha información y, que aun después de tanta tortura por parte suya, no quiso revelar.

-Mikoto tu hijo heredó tu maldición... Los dos tan hermosos, tan fuertes, tan libres... Tan perfectos-

Por un momento se permitió vagar entre recuerdos a medida que dejaba atrás el cementerio y se dirigía a la limusina que desde antes lo esperaba.

-Si no pude tenerte a ti, te juro que tu hijo será tu repuesto... Mikoto-

Y como si la luna fuera aquella mujer de piel de porcelana, le dedico tales palabras al cielo, el cual y como si se tratara de una mala película, le regalo una brisa tan fría como la mirada del hombre... En ese momento cualquiera pensaría –como lo hiso él- que había hecho una apuesta con una fuerza desconocida.

"La noche logra ponernos sentimentales, nos hace decir verdades; tal vez sea porque lo peor de nosotros brilla tanto como el reflejo de la luna y que aprovecha la oscuridad para relucir"

Frase de- JakeTaylor190

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Esta historia tiene otros 19 capítulos ya escritos en el borrador ya casi llega al final, que creen que pase en el siguiente cap?