Quédate | COMPLETA

Capítulo 15

-sábado 31 de marzo de 2017-

Él: Eres muy mala en psicología, si quieres, puedo enseñarte, es mi asignatura preferida...

Me había escrito mientras tenía clases, la sorpresa de que haya conseguido mi número me dejó shockeada y pronto apagué el celular. No sabía que decir ¿Cómo podía reaccionar? Preguntarle cómo consiguió mi número era inútil, jamás me lo diría, pero si lo pensaba dos veces había sido muy egoísta ¿Cómo nunca le agradecí por el inesperado regalo de su parte? Tener una nueva mascota en casa me mantuvo distraída durante toda la tarde y noche de aquel viernes, y nunca se me ocurrió prender el celular para volver a hablarle y darle las gracias.

Amanecí con un triste sábado, que lloviese me bajaba los ánimos, pero descubrir a un suave y pequeño cachorro en mi cama me sacaba una sonrisa. No puede evitarlo, Wilson me recordaba a él, y pronto reconocí que debía contestarle. Prendí el celular con una sonrisa y me llegaron tres mensajes más. Dos eran de Alexis y el restante era de él. Abrí su conversación.

Él: No te sorprendas, dije que conseguiría tu número, ¿te gustó mi regalito?

Yo: Estás lleno de sorpresas. Por cierto, gracias por el cachorro, lo llamé Wilson.

Él: ¡Apareciste! Me tenías preocupado.

—¿Wilson? Me encanta.

Yo: Aun me asusta que tengas mi número.

Él: No tenés que tener miedo, soy yo, el chico de la página de Facebook.

Yo: ¿Sin nombre? ¿sin voz? ¿sin imagen?

Él: Primero gustémonos por el interior.

Yo: ¿Gustémonos?

Él: Por algo se empieza.

Yo: ¿Qué estás intentando?

Él: Tal vez todo sea a base de confianza, pero quiero que me quieras sin imágenes, sin voz. Por cómo soy sin cara.

Yo: En realidad, no te conozco.

Él: Pasaron pocos días.

Yo: Empezás a hacerme creer que es un tipo de experimento social, ¿sos youtuber?

Será innecesario, pero comenzaba a desconfiar de su "sinceridad". Conocerlo sin imagen, sin voz, sin nada, solo con palabras, me parecía sumamente ridículo ¿Qué quería lograr? ¿protagonizar un estilo de cliché? No me gustaba hablar con alguien del que no estaba segura si realmente era quien dice ser. Odio las mentiras, los secretos, y que inventen para ocultar su triste verdad. Si se trataba de una chica que quería amigos, un nerd que quería una chica, o una chica que quería una chica, ¡que lo diga! Sea quien sea no me importaba, detrás de él se escondía alguien que actuaba como el surgidor de mis sonrisas ¿y si tenía una actitud conmigo que no tenía con nadie más? ¿y si actuaba ser alguien que no era? Me dolía pensar así, pero todo podía ser. Comenzaba a pensar que ver es mejor que escuchar.

Él: Jajajajaja, no, quiero ir a la universidad y ser un buen médico. Salvar vidas me haría sentir orgulloso de mí mismo, al menos en algo...

Yo: ¿Al menos en algo? ¿tanto te odias a vos mismo?

Él: A veces se cometen muchos errores, malas decisiones. Sentirse un mal nacido para tu madre no es algo que pueda esquivar.

"Cada persona que ves, está luchando una batalla de la que tú no sabes nada. Se amable siempre" resonó una de las frases que suelo leer en la red.

Yo: Sea lo que te esté pasando, puedo ayudarte ¿sabés?

Él: No es necesario que me tengas pena, hace unos minutos estabas odiándome.

Yo: Odiar es algo muy fuerte. Tal vez esté un poco frustrada, pero ya se me pasará. O al menos actuaré como que así fue.

Él: Alodi ¿alguna vez te preguntaste por qué la gente te aprecia cuando en realidad sientes que no debería ser así?

Yo: No. Creo que si me quieren es porque hay algo bueno en mí, no necesito juzgarme porque me quieran. Me parece que mientras más me quieran, menos me juzgaré.

Él: ¿Y si no me quieren es porque hay algo malo en mí?

Yo: Siempre va a haber gente que te quiera y que no te quiera. Podrás ser la persona más amable, grandiosa y solidaria del mundo, pero alguien lleno de odio, sea por envidia o lo que sea, no te querrá. No te detengas a ver quiénes son los que te aprecian y los que no, no cuentes la cantidad, mientras tengas el apoyo de alguien todo estará bien.

—Yo te apoyo.