Apasionado Tormento

Capítulo 11: Aceptando el drama

¿En qué momento de mi vida dejó de ser normal para convertirse en un libro de Jane Austen? Después del numerito que tanto Shelddon como Thomas armaron en la recepción despido al último del mal humor. Comer con las miradas curiosas de mis compañeros me hace rodar los ojos y tras las súplicas decido corta las cotilleos.

- Sí, ese es el paciente de la habitación 420 que tanto les había gustado, por el que babeaban es un amigo de la universidad -pico la ensalada de papa con el tenedor.

- Eres consciente que los dos casi se agarran a los golpes y lo incómodo que para nosotras ver esa escena.

Miro a Haley.

- Soy consciente sí, pero lo que vieron más temprano fue un concurso de meadas de dos críos - aseguro dando por terminada la conversación.

Al terminar mi turno y antes de entrar en el complejo de apartamentos hago una rápida parada en el supermercado, quiero algo dulce pero más importante le doy tiempo a Thomas para salir a donde sea que vaya y deje solo mi apartamento.

Compro algunas frutas y más croquetas para Dante, al pasar por el pasillo de congelados tomo dos botes de helados, reviso mi celular solo para ver un mensaje de Thomas que dice "Quedé con unos amigos de fraternidad, estaré hasta tarde afuera, no me esperes. X" Descarado, como si fuera a hacerlo. Cinco minutos después pago todo lo que tengo en el carrito y conduzco a mi apartamento.

- ¡Cariño estoy en casa! -suelto divertida a sabiendas que nadie me responderá.

Dante ladra y corre en mi dirección, salta en dos patas y hace que me tambalee un poco. Divertida le beso como puedo y camino a la cocina donde dejo todo en su lugar en cuestión de minutos. Dejo los tazones del perro lleno de agua y croquetas y camino desnudándome al baño. Mi celular vibra al momento que quedo completamente desnuda.

"Estoy en la puerta del edificio nena, ¿ya estás en casa? ¿Quieres cenar?"

La voz de Shelddon hace que me una corriente ase por mi espalda, sin poderlo evitar sonrío y decido llamarlo.

- Iba a preparar cena -aseguro cuando responde- ¿quieres subir? -respondo y miro mi ropa interior en el piso.

- Estoy subiendo -responde.

Corro recogiendo la ropa que dejé en el camino al momento de colgar, llego hasta la sala donde descansan mis zapatos y los dejo todo en la habitación, cuando salgo vuelvo a correr dentro, no tengo ropa puesta. Sin perder tiempo me pongo la ropa interior pero cuando voy a buscar ropa decente la puerta suena.

- ¡Voy! -Exclamo buscando un vestido casual.

Shelddon sigue golpeando la puerta y gruño tomando el abrigo de él y cubriéndome completamente.

- Hola -jadeo al abrir la puerta.

Shelddon me mira ligeramente divertido pero su mirada recae en su abrigo. Carraspea un poco.

- ¿Interrumpo algo? - Inquiere.

- Eh... no -miento y sonrío sujetando el abrigo en su lugar- entra, ponte cómodo debe estar helando allá afuera -me hago a un lado y espero que pase.

Dante corre en su dirección y tras dejar una bolsa de compras en uno de los sillones se inclina para besarlo. Aprovecho para escabullirme hasta mi habitación y tras cerrar la puerta me saco el abrigo para buscar ropa adecuada. Tiempo después salgo con ropa de ejercicio puesta.

- Estabas desnuda, ¿no es así?

Río.

- No y no seas imprudente -le reprendo de buen humor- ¿Cómo está Jaydan?