Amor Mio Dejala

Capítulo XVIII

Las maletas estaban listas, en solo cinco horas dirían a dios a ese hermoso lugar para volver a un ruidoso y complicado Japón. Jiraiya había ido a despedirse de sus vecinos prometiendo volver,algo que esperaba fuese pronto, necesitaba terminar un libro y después se daría unas muy largas vacaciones, ahora luego de terminar con su último libro romántico debía promocionarlo solo un poco y se dedicaría de lleno a su último trabajo literario.

— Desde que Kakashi se fue has estado un poco mas torpe de lo normal ¿discutieron? — Jiraiya preguntó al ver a Naruto mirando hacia los árboles.

—No, es solo qué... — Naruto guardo silencio de forma abrupta, no sabia como expresarse sin ser mal entendido y Jiraiya le había tomado una especie de cariño de hermano o algo asi a su pareja que no sabia si hablar del tema con él le obligaría de algún modo a tomar partido por alguno de los dos.

—Anda, cuéntamelo prometo ser lo más imparcial posible — alentó el hombre de mayor edad — quiza mi experiencia en escritura y en la vida sirvan de algo en esta situación — agregó.

— Kakashi me ha pedido vivamos juntos.

— Pero no estas del todo convencido y la pregunta es, ¿por qué?

— Es qué, bueno en realidad — Naruto se puso colorado y comenzó a torcer la manga de su suéter evidenciando su nerviosismo con el tema

Jiraiya leyó el mensaje corporal del rubio — no han dado el siguiente paso ¿no?

Naruto prensó el labio inferior.

—Es qué me da miedo ser yo el que no este seguro, o sea si estoy seguro de mis sentimientos por Kakashi, le quiero y me gusta como me hace sentir, con él me siento seguro de mi mismo, incluso me agrada cuando me veo al espejo,es solo que  vivir juntos sin siquiera haber llegado a la intimidad me hace sentir culpable y aún no se por qué.

—Yo no dudo que sientas algo por Kakashi, pero de lo que sí estoy seguro es que aun no es muy fuerte. — dijo pensativo — y, con respecto al por que no has intimando yo creo que si lo sabes, pero eso debes aceptarlo tú para darle solución, da el primer paso Naru, después todo fluirá, sólo procura que no te tome mas tiempo. Tienes un lazo Naruto. Solo hay que seguir el hilo correcto para saber con quién.— Jiraiya llevo una mano al cabello de Naruto y lo revolvió.

⛅

Sai en ocasiones pensaba en que hubiera sucedido de haber tenido un hijo cada vez que miraba a los niños jugar en el parqué, solía caminar hasta detenerse en los lugares donde escuchaba sonrisas y el bullicio de los infantes, a veces llevaba consigo lienzos y acuarelas donde plasmaba imágenes según su estado de ánimo. Fue de ese modo que conoció al doncel mas bonito jamás hubiese visto;  se encontraba triste y con lágrimas corriendo por sus mejillas blancas, situación que en lugar de restar belleza a sus parecer la resaltaba más.

No quería ser impertinente con el bello doncel pero algo lo impulso a ofrecer su ayuda, algo en su alma le obligo a caminar y pararse frente a él, pero las palabras de consuelo murieron en su garganta cuándo los ojos turquesa se fijaron en él.

Se sintió hipnotizado.

— lo que me hacia falta para culminar mi día— espetó molesto —un idiota asombrado con mi belleza — absorbió por la nariz y se limpio las lágrimas, de nueva cuenta tallando de más la manga del suéter, dejando así la piel enrojecida.

Las nubes se abrieron en el cielo y el sol hizo brillar los cabellos rojos de Gaara. 

Sai abrió la boca para jalar un poco de oxígeno. Definitivamente era muy bonito el doncel frente a él

—Oye raro — le dijo ya fastidiado por la actitud de Sai—  si no me vas a tratar de consolar o esas cosas mejor largate — le ordeno.

—En realidad no quiero consolarte — consiguió hablar el pelinegro — si lo qué quieres es sentirte mejor llorando entonces continúa, solo que llorar en soledad hace mas fuerte el sentimiento y llorar en compañía nos hace sentir menos sólos.

Gaara elevó una ceja —Rayos, acabas de matar el sentimiento, me llamo Sabaku no Gaara y tu eres...— estiro la mano.

Sai se apresuro a tomar la mano ofrecida, sintiendo de inmediato la suave y tibia piel.

—Soy Sai,¿Quieres hablar?— ofreció, deseando hacer tiempo y así no tener que despedirse del doncel.

— Te acabo de conocer, pero — Gaara evaluó la situación, en realidad Sai le dio confianza y término por aceptar — esta bien hay una cafetería aquí cerca.

Sai quiso exclamar un ¡Si! Por su logro con el doncel, pero solo lo celebro de forma interna.

—¿Tu pagas cierto? — dijo el pelirrojo caminando a su lado.

— Sí— fue todo lo que respondió Sai

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Pasajeros con destino a Japón, favor de abordar por la puerta norte.

Naruto suspiró, llegando a Japón visitaría a sus padres y daría comienzo a su nueva vida. Ahora tenía metas y muchas ganas de hacerlas realidad, tomar cursos de fotografía, retomar algo de su actividades como escultor y continuar con su crecimiento personal.

Empujó su maleta y se dió ánimos.

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—Señor Uchiha acaba de llegar la señorita de bienes raíces que solicito esta mañana — La secretaria de Sasuke aviso por el intercomunicador.

Sasuke suspiro, había tomado la decisión de vender el departamento y comprar otro mas cerca de la empresa y otro cerca de la playa para de vez en cuando ir a descansar. —Que pase— solicitó.

La chica agradeció a la secretaria con una reverencia y entro a la oficina indicada.

Lo que vio fue agradable a la vista, pero no mostró ninguna expresión, la ética profesional y su trabajo requerían seriedad, pero no negaría que el hombre frente a ella a pesar de parecer sumamente serio era muy sexy y varonil.

Sasuke por otro lado le miro pero no tuvo ningún pensamiento adicional al de trabajo, así que haciendo gala de su educación le invitó a tomar asiento.

—Buenas tardes señor Uchiha, mi nombre es Sakura Haruno su nueva agente de bienes raices.

—Un gusto — dijo para luego sacar una carpeta con la información necesaria del departamento y  otra con la solicitud de lo que necesitaba adquirir.

Sakura sonrió de forma disimulada, había comprobado la seriedad del hombre, revisó los documentos entregados — muy bien, todo esta en orden — agregó poniéndose de pie — nos vemos la próxima semana o antes si surge cualquier cosa.

Sasuke la vio salir y  cuanto estuvo sólo rompió el lápiz que tenia en las manos.  El departamento seria vendido y no habría vuelta atrás, dejaría ir parte de su historia con Naruto en ese departamento, y aunque no todo fueron recuerdos buenos, le resultaba bastante difícil deshacerse de algo tan importante y especial.